El debate sobre cada uno de estos temas hoy en día lo encontramos a nivel global. Está abierto en todas partes con diversas modalidades que dependen de la historia, de los distintos sistemas electorales y de los partidos.

Democracia, elecciones y partidos son conceptos generales que van modificándose a medida que transcurren los años según los tiempos y los lugares.

El concepto de democracia tiene una larga historia. Sartori diría que esta historia tiene dos acepciones: por una parte, se trataría sobre la democracia ideal, esto es, sobre aquello que una democracia debería ser en cualquier momento histórico dado y, por otra parte, se trataría de la democracia real, es decir, de la ya realizada, de aquello que la democracia es en un momento específico dado.

Los estudiosos de estos temas, utilizan una serie de indicadores, para saber si las democracias funcionan satisfactoriamente y que camino o dirección están tomando: ¿se acercan a la “democracia ideal”?, o ¿están bastante alejadas de la meta?.

Desde 2006, la Unidad de Inteligencia de The Economist elabora un Índice de Democracia en el que analiza el estado de la democracia en 165 países y dos territorios del mundo. Toma como referencia cinco elementos: proceso electoral, funcionamiento gubernamental, participación política, cultura política y libertades civiles, The Economist divide todos los Estados analizados en cuatro tipos de regímenes según su nota global: democracia plena, democracia imperfecta, régimen híbrido o régimen autoritario.

Un indicador importante de este estudio es que sale de la contraposición entre democracia y dictadura. Con el concepto de los regímenes híbridos, también conocidos como “anocracias”, se permite establecer una zona de transición gris entre dos términos absolutos lo que nos da una mejor definición sobre como son los regímenes democráticos y los autocráticos.

En la edición correspondiente al año 2020, el índice de Democracia de The Economist, refleja que casi la mitad de la población del planeta, el 49,4%, vive en algún tipo de democracia, aunque solo el 8,4% lo hace en una democracia plena frente al 8,9% que lo hacía en 2015. Además, más de un tercio de la población mundial está gobernada por un régimen autoritario, debido principalmente a China con su casi 1,400 millones de habitantes. Estos datos son para tomarse en cuenta porque en lugar de acercarse los países a la “democracia ideal” se están alejando de ella.

La nota media global del estado de la democracia en el mundo, en una escala de 0 a 10, fue de 5,37 en 2020, un resultado peor incluso que el obtenido en 2010, cuando la crisis económica hizo caer el indicador hasta el 5,46. La principal causa de este retroceso ha sido, según The Economist, la pandemia, pero en concreto las medidas impuestas por los diferentes gobiernos para restringir libertades individuales, los ataques a la libertad de expresión y la ausencia de transparencia en las medidas adoptadas.

Más allá del impacto de la pandemia, el estudio de la revista británica también identifica un cambio hacia el este en el equilibrio global de poder. El ascenso de tres países asiáticos al grupo de las democracias plenas: Japón, Corea del Sur y Taiwán y la caída de dos europeos: Francia y Portugal. Asia consiguió frenar los contagios mucho más rápido que Europa.

Dentro de esa dinámica de cambio de poder sobresale el caso Taiwán. Este Estado celebró sus elecciones en 2020, contó con una elevada participación y una gran movilización de los jóvenes, dando muestras de la resiliencia de la democracia nacional en un momento en el que la acumulación de poder y el atraso de procesos electorales marcaban la actualidad política internacional. (Continuará…)

Expresidente municipal de Querétaro y ex legislador. @Chucho_RH

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