Cunde el mal ejemplo del Presidente de la República; en el extremo de la rebeldía al Estado de Derecho, aseguró: “no me vengan con ese cuento, de que la ley es la ley”. Se resiste y las autoridades emanadas de su partido también quebrantan el Derecho Positivo y transgreden las leyes en franco retroceso al sistema legal que rige la vida democrática de los mexicanos y las autoridades: todos están subordinadas al mandato de la ley.

Sin arquitectura legal que forma parte de cualquier Estado democrático, emanado desde el mismo Poder, se rompe el equilibrio social que mantiene la armonía; mediante el pacto social se garantiza la seguridad pública y se protege el desarrollo de un pueblo bajo el imperio de la ley. Al presidente siempre le han molestado las ataduras legales, acostumbrado a transitar por la vida sin ataduras, sin ley que limite su actuar, él decide qué está bien y qué no le agrada y no por medio del marco legal. Su criterio es la “norma” que rige su vida. Ha violentado cuanta ley no le ha satisfecho sin sufrir consecuencias.

Las acciones a cargo del titular del Poder Ejecutivo, se subordinan a la Constitución y demás leyes secundarias. Su tozudes lo ha llevado a desobedecer el Estado de Derecho, rompe el equilibrio de Poderes, se queja de la impartición de justicia cuando le es desfavorable y crea sus propias disposiciones por decreto, quebrantando todos los principios del Derecho.

Su rebelde comportamiento refleja un claro desprecio al estatus jurídico y propicia la misma conducta de sus subordinados, emulan ilegales acciones. Todos sus secretarios hacen lo mismo, confrontan las normas y niegan los hechos. Estamos en presencia de un golpe al Estado de Derecho propiciado por autoridades emanadas de la 4T. Hacen presa las acciones arbitrarias de las “autoridades” del gobierno federal y de los Estados gobernados por Morena. El cinismo y la irresponsabilidad, característica que los identifica.

El secretario Adán López violenta la ley, encabezó un mitin y lo niega; el secretario Ramírez de la O, confronta y espeta: “sí violé la Constitución ¿Y?” También gobernadores hacen campaña que les prohíbe la Constitución. López enfrenta a los ministros cuando pierde ante la ley, dijo: “a mí no me vengan con el cuento de que la ley, es la ley. Incita a sus seguidores a poner casillas fuera del marco jurídico para que voten en su “ratificación”. Si no es por medio de la ley

¿Cómo se puede contener los abusos de autoridad? ¡El presidente López Obrador representa un peligro real!  
Analista legislativo. @HectorParraRgz

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