En Querétaro, siete de cada 10 menores sufren algún tipo de violencia escolar (bullying). Ya sea verbal, emocional, física o acoso sexual, el fenómeno ocurre desde preescolar hasta preparatoria, aunque los que tienen de 12 a 15 años son los que más inciden en esta práctica.
La directora general de la Fundación en Movimiento, Trixia Valle Herrera, manifestó que en la secundaria los varones son quienes más violentan a sus compañeros, con 70% de las agresiones realizadas en este nivel educativo, en contraste con las mujeres que sólo participan en 30% de la violencia escolar.
Sin embargo, las niñas —del mismo nivel educativo— son las que generan 60% de la agresión a través de las redes sociales, mientras que los niños generan sólo 40%, dio a conocer la también autora del libro Ya no quiero ir a la escuela.
Causantes
Dijo que este tipo de violencia inicia con la exposición de los niños a las caricaturas, videojuegos y juguetes que se relacionan de alguna forma con la violencia: “Van corrompiendo a los niños, hasta que estos entienden la violencia como un fenómeno normal, ya que lo adoptan y lo replican de forma natural”.
Los menores comienzan a comprender el significado de la violencia a los dos años de edad, pero es a los seis años de vida cuando incurren en la agresión escolar
Durante el Congreso de Violencia Intrafamiliar, organizado por el Sistema estatal DIF, Valle Herrera presentó la ponencia Tú puedes parar el bullying.
El evento giró en torno a la prevención de violencia intrafamiliar y al análisis académico y científico de la prevención de este fenómeno.
En el acto estuvieron también la directora general del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF), Eugenia bueno Zúñiga; la procuradora de la Defensa del Menor y la Familia del SEDIF, Patricia Cabrera Orozco, y la presidenta del patronato del DIF estatal, Sandra Albarrán de Calzada.
Sandra Albarrán pidió reflexionar sobre el uso de las redes sociales: “A los jóvenes que están utilizando las redes sociales, que comentan, que juzgan y critican con un clic, decirles que no saben el daño que le pueden hacer a una persona. Transmitirles que realmente pueden deshacer la vida de una persona”.
