Para muchos queretanos el día último de marzo fue un verdadero caos, pues al acudir a realizar sus trámites para el refrendo de sus derechos vehiculares en los puntos de recaudación instalados en el estado, se encontraron con largas filas.
Desde las 7:00 de la mañana cientos de personas se dieron cita para ser atendidos en el auditorio Josefa Ortiz de Domínguez. Rconocieron que la espera fue por “la mala costumbre de dejar siempre todo al final”.
Para algunos, esta situación les causó pérdidas en sus negocios, pues comerciantes, taxistas, vendedores y demás tuvieron que dejar de hacer sus labores para aprovechar esta modalidad implementada por el ejecutivo estatal.
“Por dejar pasar el tiempo, ahora tengo que aguantar. Tuve que cerrar mi local de flores que tengo en el mercado de la Cruz, lo que me genera como unos 3 o 4 mil pesos de pérdidas”, indico José Antonio Camargo.
“Ya sabemos que de seguro saldremos como hasta las cinco de la tarde, por eso mejor preparamos unas tortitas y no llevamos a los niños a la escuela, porque no iba a poder ir por ellos. Si bien nos va y después de venir aquí de ir al banco y todo eso, pues más o menos iremos terminando como a las tres de la tarde”, mencionó la señora Catalina Orduña.