Ante el recorte en el programa de entrega de televisores de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para transitar al apagón analógico, las autoridades deben replantearse fechas y medidas, ante la imposibilidad de que el plan cumpla con las metas, pidieron actores relacionados al sector.
La Secretaría de Hacienda anunció un recorte en el programa de entrega de televisores de la SCT de 13 millones a 10 millones de equipos, por lo que de mantenerse el padrón original de beneficiarios de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), de 13.8 millones de hogares, la dependencia sólo puede cubrir 72.4% de este universo a nivel nacional, por lo que incumplirá con 90% de cobertura que pide la ley.
“Considero que hay que evaluar las alternativas ante esta situación extraordinaria”, expresó el comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) Fernando Borjón, a través de su cuenta de Twitter este sábado.
La legislación prevé que sea la SCT quien se encargue de los programas para asegurar que al menos 90% de los beneficiarios de algún programa de la Sedesol tenga una vía para recibir las señales digitales una vez decretado el apagón analógico, aunque esta penetración se mide por zona cubierta.
“Estaría en duda el apagón nacional, pero pueden apagar por regiones o ciudades”, opinó el vicepresidente de Televisión Digital y Abierta de Grupo Televisa, Felix Araujo, vía Twitter.
La reforma constitucional de mediados de 2013 exigió al gobierno la construcción de una red mayorista de telecomunicaciones que use la banda de los 700 MHz para vender capacidad de servicios móviles a las empresas privadas, antes de finalizar 2018.
El apagón analógico a nivel nacional debe darse antes del 31 de diciembre de 2015, según el propio texto constitucional y la legislación secundaria, por lo que se debe replantear si se puede mantener esta fecha, apuntó el diputado del Partido Acción Nacional (PAN), Juan Pablo Adame.
El recorte de 3 millones de televisores al programa significará un ahorro de 6 mil millones de pesos (mdp), tomando en cuenta un precio promedio por equipo de 2 mil pesos.
El gobierno aún cuenta con la alternativa de regresar al modelo original de entregar decodificadores, opinó el analista de la consultora especializada Telconomía, Jesús Romo.