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Hoy la apuesta de los concesionarios afectados por el rescate de la banda de 2.5 Gigahercios (GHz), que inició el gobierno federal el pasado 8 de agosto, se encuentra en las negociaciones que se darán con la administración que encabeza Enrique Peña Nieto, presidente de México.
Los concesionarios afectados que se agrupan en la Asociación de Servicios Inalámbricos de Telecomunicaciones (Ansitel) quieren que sus interlocutores sean los funcionarios actuales.
“Esperamos que esta administración juzgue las cosas con justicia, y no sólo detenga el proceso, sino que nos dé la oportunidad de competir en el mercado de datos móviles”, dijo Alejandro Mayagoitia, presidente de la asociación Ansitel.
En la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) dicen que el hecho de que la administración de Calderón no licitara el espectro rescatado de la banda de 2.5 GHz, signifique dar marcha atrás en el proceso de rescate de este espectro.
“A mi no me gustaría adelantar temas relacionados con la licitación, pero el hecho de concluir que lo vamos a licitar estaría adelantando una conclusión de un expediente que no tenemos resuelto”, precisó Héctor Olavarría, subsecretario saliente de Comunicaciones de la SCT.
Enrique Peña Nieto, presidente de México, aseguró el sábado que enviará una iniciativa de reforma para “reconocer en la Constitución, el derecho de acceso a la Banda Ancha y una serie de reformas para generar mayor competencia en telefonía, servicios de datos, televisión y radio”.
La propuesta fue bien recibida por los analistas, pero aún esperan conocer más detalles de los proyectos.
“Primero hay qué ver el sentido de la resolución del procedimiento, si vas a rescatar total, parcialmente o va a ser no rescatar”, dice Olavarría.
Una pesadilla
El asunto del rescate de la banda de 2.5 GHz se ha convertido en una pesadilla para el gobierno federal: En primer lugar, por el papel que asumió Joaquín Vargas, presidente del consejo de administración de MVS Comunicaciones, al hacer públicas diversas conversaciones en textos de Blackberry con miembros del gabinete presidencial de Calderón, donde se condicionaba la renovación de concesiones por el despido de la periodista Carmen Aristegui.
Como se recordará, Vargas aseguró que Alejandra Sota, entonces coordinadora de Comunicación Social de Los Pinos; Javier Lozano, senador por Acción Nacional y Dionisio Pérez-Jácome, titular de SCT, condicionaron la renovación de las concesiones de MVS a una disculpa pública por parte de Aristegui.
Atraso
Pero ahí no terminó todo, más adelante la SCT tuvo qué enfrentar al resto de los concesionarios de la Ansitel (con excepción de Megacable), que han interpuesto diversos litigios en contra del rescate de la banda de 2.5 GHz.
La noticia más reciente es que uno de ellos logró suspender el rescate de la SCT de manera indefinida.
¿Por qué el gobierno de Calderón decidió rescatar la banda en los últimos meses de su gestión, si hay constancia que el debate sobre el uso de la banda de 2.5 GHz pudo iniciar desde enero de 2000?
El 19 de enero de 2000, concesionarios de MMDS (servicio de distribución multipunto multicanal o multichannel multipoint distribution service), a través de la Ansitel solicitaron a la subsecretaría de Comunicaciones de SCT formar una comisión mixta cuyo objetivo es permitir que los concesionarios de televisión restringida, audio y datos cuenten con los canales de retorno para prestar el servicio de transmisión de datos de doble vía.
Del mismo modo, los concesionarios deberían prestar servicios adicionales de telecomunicaciones brindando un uso más eficiente al espectro radioeléctrico.
La banda de 2.5 GHz representa la oportunidad de generar competencia en el mercado de provisión de servicios de banda ancha a través de plataformas inalámbricas. En México el mercado está dominado por Telmex y Grupo Televisa a con sus empresas de tv restringida.
El poder detrás del poder
“El rescate ocurre a solicitud expresa de una filial de Televisa, Cablevisión, lo que evidencia la incapacidad de la autoridad de actuar por su propia cuenta”, dice Jorge Fernando Negrete, director general de Mediatelecom Policy&Law.
Está documentada la injerencia de Televisa para que no se le refrenden las concesiones y se reasigne la banda 2.5 Ghz a otros operadores, dice el directivo.
De acuerdo con Negrete, el 1 de agosto de 2007 la Cofetel emitió una opinión favorable a seis solicitudes de prórroga de las concesiones de MVS.
Dicha resolución fue firmada por unanimidad por los entonces cinco comisionados de la Cofetel: Héctor Osuna Jaime, presidente; Ernesto Gil Elorduy, Gerardo Francisco González Abarca, Eduardo Ruiz Vega y José Luis Peralta Higuera.
La opinión favorable de la Cofetel vino después de que la UIT identificó y recomendó el uso de la banda 2.5 GHz para los servicios de banda ancha móvil.
Cuando la UIT emitió esa recomendación, la Cofetel sabía que la televisión restringida vía microondas venía perdiendo suscriptores y que MVS utilizaría la banda 2.5 Ghz para banda ancha móvil.
MVS creó el servicio E-go, promocionado como “Internet para llevar”, que tiempo después canceló.
Esta opinión de la Cofetel vino acompañada de otra de la Comisión Federal de Competencia, que no encontró elementos que pudieran configurar alguna práctica monopólica o concentración indebida por parte de MVS.
