Para la primera semana de agosto, la principal atención de los inversionistas se va a centrar en el dinamismo exportador de China y Estados Unidos, ambos países darán a conocer datos de comercio exterior, los cuales permitirán conocer cómo se encuentra la recuperación económica mundial.
Cifras positivas del intercambio comercial de las principales potencias del mundo, darían mayor confianza a los inversionistas y aumentaría la preferencia por el riesgo, luego de que la semana pasada se dio una fuerte volatilidad y cautela.
Además, en el vecino país del norte se espera información del sector servicios a julio, tanto para el indicador de comparas gerenciales (PMI por sus siglas en inglés), como para el ISM no manufacturero. También se darán a conocer los indicadores de ventas al mayoreo y crédito al consumidor.
En México, las cifras más relevantes serán las ventas de autos; así como el dato de inflación de julio. Para este último indicador, el consenso de analistas espera un avance mensual de 0.25%. También se publicarán datos de la confianza del consumidor a julio y la inversión fija bruta, con información a mayo.
En el viejo continente se dará el anunció de política económica del banco central de la Zona Euro, así como del Reino Unido. Para ambos organismos no se anticipa que se puedan presentar cambios en las tasas de interés, las cuales se mantiene en niveles mínimos históricos de 0.15% y 0.50% respectivamente.
Bajo este contexto, en esta semana se espera el retorno de las ganancias en los mercados accionarios, luego de que la semana anterior la aversión al riesgo provocó datos negativos, por lo que algunas valoraciones se encuentran castigadas y se observasn compras de oportunidad. Sin embargo no se deja de lado el riesgo que implica los conflictos geopolíticos que contribuyen con su cuota de incertidumbre.
Por lo pronto, el pasado viernes en Wall Street los índices bursátiles se alejaron de sus niveles máximos históricos. El índice industrial Dow Jones tuvo una pérdida semanal acumulada de 2.8% y lleva en conjunto cuatro sesiones a la baja; mientras tanto la minusvalía semanal en el Nasdaq y el Standard & Poor’s 500 fueron de 2.2% y 2.7% respectivamente.
La BMV se desligó de la sus referentes en Nueva York y finalizó el viernes con un avance de 0.38%, pero no le alcanzó para revertir la pérdida de 0.90% que acumuló durante toda la semana previa.
En el mercado de cambios, fue una semana en que el dólar se fortaleció por la aversión al riesgo y el temor de que se presente un cambio antes de los previsto en las tasas de referencia en Estados Unidos.
De esta forma, en su paridad interbancaria el dólar cotizó en 13.19 pesos por unidad, un avance semanal de 23 centavos equivalente a una depreciación de la moneda mexicana de 1.78%.