El gobierno federal tomó la determinación de avanzar gradualmente en la apertura de la venta de gasolinas con estaciones de servicio extranjeras para evitar un impacto inmediato en los precios de los combustibles en la población.
Funcionarios de la Secretaría de Energía (Sener) comentaron que para que funcione un esquema de libre competencia, es necesario que los precios se fijen por la regla simple de mercado: libre juego de la oferta y la demanda y en México, “ todavía no es prudente liberalizar el precio de las gasolinas”.
Indicaron que la propuesta de legislación secundaria prevé que el precio de la gasolina y Diésel se libere a partir de 2020. “En ese momento los precios van a reflejar las nuevas condiciones del mercado”.
Las fuentes consultadas, que pidieron el anonimato, explicaron que permitir la apertura inmediata, con la aprobación de las leyes secundarias, habría obligado a aumentar más allá de los 9 centavos por litro el precio de la gasolina Magna y más de 11 centavos el de Premium y Diésel.
Tan sólo para homologar los precios vigentes en México con nuestro principal socio comercial, que es Estados Unidos (precios al 2 de mayo de 2014), habría sido necesario aumentar 30 centavos por litro el precio de la gasolina Magna; 77 centavos la Premium; y, 69 centavos el Diésel, de acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros y la Energy Information Administration, organismo dependiente del Departamento de Estados Unidos.
Por ello, el gobierno federal estableció un régimen especial progresivo, cuya finalidad es “minimizar el impacto en la actividad de venta al público de combustibles, así como establecer las bases para una apertura ordenada en el sector de estaciones de servicio”, explicaron.
El planteamiento contenido en la Ley de Hidrocarburos propone una ruta crítica para la apertura gradual en gasolina y Diésel:
En lo que resta del año, permanecerán vigentes los aumentos mensuales de 9 centavos por litro al precio de la gasolina Magna y de 11 centavos por litro para la Premium y Diésel.
Todavía en este año y hasta 2018, Petróleos Mexicanos será el único encargado de importar estos combustibles.
Para 2015 y hasta 2019, cambiará el esquema de aumentos y será la Secretaria de Hacienda la encargada de fijar precio de gasolinas y el Diésel y actualizarlos conforme a la inflación.
Dentro de este periodo, entre 2017 y 2018, se empezará a realizar la venta de combustibles al público con marcas distintas a Pemex y en gasolinerias diferentes a la Franquicia Pemex, con lo que se prevé la llegada de estaciones de servicio similares a las que operan en Estados Unidos.
Se estima que en 2019 todos los jugadores que participen en el esquema de comercialización de combustibles podrán importar de cualquier parte del mundo las gasolinas y el Diésel para su venta en nuestro país.
Y, será a partir de 2020, cuando se liberalice el precio de las gasolinas en el mercado nacional.
La Amegas, que preside Pablo González, propuso al gobierno establecer programas y plazos para competir con empresas extranjeras y con la calidad de los combustibles.