Las nuevas disposiciones fiscales podrían provocar una disminución de hasta 14% en el poder adquisitivo de las familias en el país, aseguró el presidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro, Juan Carlos García Solís.
Explicó que las personas deberán tener una mayor mesura en sus gastos, y determinar de una manera consciente cómo y en qué ocuparán el dinero, así como hacer un presupuesto de prioridades, ya que de lo contrario podrían presentar problemas financieros.
En cuanto a las grandes empresas, dijo que se tendrá que analizar cada uno de los sectores para conocer las afectaciones por los gravámenes aplicados, sin embargo, no descartó que se presente una desaceleración económica hacia futuro.
“Si la población tiene menos poder adquisitivo sus compras se reducirán, por lo que las industrias tendrán que disminuir sus producciones para poder colocar sus mercancías en los puntos de venta”, expuso.
Destacó que el incremento en el salario mínimo, de 3.9%, no será suficiente para cubrir el resto de las alzas que se presentarán en productos y en combustibles, como el de las gasolinas y diésel, que se registraron el primero de enero.
En días pasados, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio Servicios y Turismo (Canaco) de la entidad, Roberto Ruiz Hernández, declaró que en los primeros meses de este 2014 se podría presentar un efecto inflacionario con las alzas de precios.
García Solís reconoció que es importante que las autoridades transparenten el uso de los recursos que perciben a través de los impuestos, ya que la gente se rehúsa a pagar porque no ven reflejados sus aportaciones en obra social.
Comentó que con el aumento en la recaudación se beneficiarán los servicios sociales, así como los programas de seguridad, salud, educación entre otros, y que a su vez se reflejarán en una satisfacción global para la sociedad.
