La animación para la creación de series, largometrajes y cortometrajes en México es una industria que tiene potencial para aumentar la derrama económica en el país y puede llegar a representar hasta 13% del Producto Interno Bruto (PIB), aunque es necesario dar más apoyos a los productores, afirma José Iñesta, director general de Pixelatl.
“Este sector es resistente a crisis económicas, en algunos países representa entre 11% y 13% del PIB; en México sería el tercer ingreso económico más importante, pero mucho del contenido no es producido en el país, sino que es importado”, explica en entrevista con EL UNIVERSAL.
Pixelatl es una plataforma que organiza un festival de animación y genera convocatorias para promocionar el talento mexicano.
Actualmente, los grandes corporativos como Disney, DreamWorks, Nickelodeon, Cartoon Network y Discovery Kids controlan esta industria a escala global; en México hay esfuerzos como Ánima, Huevocartoon, Mighty Animation y Boxel Studio.
“En México existen 500 estudios, hay un grupo importante en Guadalajara, otro en la Ciudad de México, y otros en zonas como Mérida, Chihuahua y Tijuana, que tienen mucha producción animada, incluso maquilan a otros estudios”, dice.
Con Andrés Manuel López Obrador como virtual presidente de México, Iñesta dice que es necesario reconsiderar el apoyo al sector y generar una mayor industria del conocimiento.
“Más allá de refinerías y de otros proyectos de inversión, se debería apostar por la industria del conocimiento. En los años 90, una computadora para hacer animación costaba 90 mil dólares, pero hoy puedes hacer animación con celular o una tableta, las herramientas son baratas y el mercado creció”, destaca.
México representa el cuarto país con mayor número de boletos de cine vendidos en el mundo, pero ese dinero se va a grandes distribuidores, afirma Iñesta.
“México tiene 29 millones de niños menores de 12 años que consumen 4.5 horas de contenido audiovisual diario no apto para su edad, son contenidos de narcotráfico, infidelidades y estamos creando una sociedad sin vida, con aspiraciones malas, que van a querer ser narcos”, opina.
Aunque no hay cifras exactas sobre el mercado, para dar una perspectiva, el personaje animado Peppa Pig alcanzó un valor de 500 millones de dólares en 2014. En México, la maquila por minuto de este personaje rondaba los 200 mil pesos.
Sí se puede. Según Pixelatl, en 2017 se generaron 170 largometrajes en México, de los cuales 89 se estrenaron y el resto se guardó; sólo tres recuperaron su inversión.
“Cabe decir que los largometrajes animados siempre recuperan toda su inversión, pero los grandes estudios de animación están produciendo una o dos películas cada año”, asegura Iñesta.
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