Este miércoles la empresa de capital holandés CSI inauguró de manera oficial su primera planta en México, la cual se ubica en El Marqués, desde donde la compañía pretende atender a los mercados de Latinoamérica y Norteamérica, además de afianzarse en el mercado nacional a partir de atender nuevos segmentos.
CSI aplicó una inversión de 400 mil euros en el municipio metropolitano, en donde generará 40 empleos de alta especialidad —de momento son 18— a partir de la producción de paletizadores modulares que se conectan a las líneas transportadoras en el fin de línea.
A nivel nacional CSI busca enfocarse al mercado de las micro, pequeñas y medianas empresas, al advertir que existe una falta de automatización en los procesos de las mismas, lo que resta eficiencia en su operación.
Ivette Arredondo, directora adjunta de la planta, detalló que la locación tiene capacidad de producción de 100 unidades por año.
“Nuestras máquinas son estándar y queremos llegar y ofrecerle al cliente local una solución rápida. Vemos una oportunidad muy grande”.
Por otra parte, la planta en Querétaro permitiría disminuir los tiempos de entrega, al contar con producción más rápida y fácil de mover en las distintas regiones del país.
“Tenemos un plan muy agresivo de reducirlo a 6 semanas. Antes de tener instalaciones aquí tardábamos cerca de doce semanas”, acotó.
CSI cuenta con oficinas en Holanda y tiene subsidiarias en Rumania y China, además de que cuenta con oficinas de venta en todo el mundo.
Con más de 20 años de operación en México atendiendo a trasnacionales a través de una oficina de ventas, la compañía busca proveer de soluciones a pymes.
Jan de Bruijin, CEO de CSI Group, dijo que se ofrecerá un mayor nivel de competitividad para compañías que crecen al ritmo del sector industrial nacional y extranjero.
