Se les ha llamado “el motor de la economía” o la “columna vertebral de la economía” para explicar en pocas palabras lo que significan para México las empresas familiares.
Son las más numerosas en el país y generan más de la mitad del Producto Interno Bruto (PIB), así como un alto número de empleos.
Las empresas familiares en México están representadas tanto en la tiendita de la esquina, como en los consorcios que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores. Según un estudio realizado por la consultora KPMG, 90% de las firmas que cotizan en la BMV tiene una clara representación familiar en el capital y en el control.
En nuestro país las micro, pequeñas y medianas empresas (mypymes) que corresponden al modelo familiar suman 99%, de acuerdo con el último censo económico del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Su importancia no sólo es vital en México, pues es similar a Estados Unidos, en donde al igual, más de 90% de compañías tiene un origen y una participación familiar, según KPMG.
Frente a esta realidad, John Davis ha dedicado 35 años en el vecino país al estudio de estos entes económicos tan importantes para la generación de riqueza y bienestar.
Es fundador y director de dos organizaciones internacionales que apoyan el desarrollo de las empresas familiares: la consultoría Cambridge Advisors to Family Enterprise y el think tank llamado Cambridge Institute for Family Enterprise.
Es miembro de la Harvard Business School desde 1996 y cofundador del programa de esa universidad “Family in Business”.
Su investigación le ha llevado a crear el modelo de tres círculos, un paradigma en el estudio de las empresas familiares que asegura que para que una firma de este tipo sobreviva —de la primera a la segunda generación, entre 100 sólo sobreviven 25, en la tercera apenas cerca de 15 y a la cuarta alrededor de cinco— se necesita hacer crecer los activos, tener unidad familiar y hacer crecer también el talento al interior de la familia.
La expansión recomendada por el profesor es de 6% de forma anual para que la empresa familiar conquiste el éxito y sobreviva.
Puede sonar ambicioso, pero Davis asegura que esto es necesario para que la riqueza crezca al mismo tiempo que también crece la familia.
Davis le ha llamado a esta terna necesaria para el éxito “mantra”, explica en entrevista a propósito de su visita a México con motivo de la cumbre organizada en la ciudad de León, Guanajuato, por parte de la Revista de Negocios de Harvard (HBR por sus siglas en inglés).
¿En qué consiste este mantra?
—Mi investigación ha demostrado que para mantener a las empresas familiares exitosas por generaciones necesitas crecer los activos de la familia, mantenerla unida así como construir el talento familiar al interior. Entonces el mantra para las familias es: crecimiento, talento y unidad.
El valor de tu compañía necesita crecer a través del tiempo, la unidad necesita ser fuerte, porque por ejemplo, si tú y tus hermanos no se llevan bien y se separan y entonces el miembro que se separó busca venderles las acciones y ustedes están dispuestos a comprárselas, eso es claro.
Y también necesitas desarrollar talento en tu generación, ya sea talento como dueños o como directores de la empresa.
¿Cómo lidiar con el conflicto? Esto muy común al interior de las familias.
—Es complicado y va directamente relacionado con la unidad de todos sus miembros, ¿cierto? Porque estar unidos implica en que están de acuerdo en lo que están tratando de hacer y en cómo lo están tratando de hacer.
Es natural en las familias tener conflictos, a veces son pequeños, a veces son grandes.
¿Cuál podría ser la solución?
—Necesitas tener acuerdos sobre cómo van a tomar decisiones y sobre lo que va a pasar si uno de ellos decide irse, cómo vamos a comprarle sus acciones.
Los buenos acuerdos entre dueños son una buena póliza de seguros para las familias.
En adición y de manera proactiva, la familia necesita hablar. Necesita sentarse y hablar de sus intereses y conflictos y estar dispuestos a tratar de estar de acuerdo en las importantes cuestiones que enfrentan.
Entonces hay algo muy importante: la unidad, tienes que trabajar en ella porque las diferencias entre hermanos y hermanas son muy comunes.
¿Tienen que trabajar esto de una manera diaria?
—Con suerte de manera diaria. Lo que sí es que necesitas comunicar lo suficiente y tratar a todos con respeto, dar información a los miembros, pero tampoco puedes pasar toda tu vida tratando de mantener a tu familia unida, tienes muchas cosas qué hacer, tienes un trabajo, tienes otros intereses.
Entonces necesitas enfocar el tiempo necesario en eso para que funcione. En un año sería adecuado para una pequeña familia reunirse cuatro o seis veces con una agenda para tratar temas juntos y hablar de desacuerdos.
Ese proceso exclusivamente puede realmente ayudar a mantener una familia unida.
¿Es gobierno corporativo?
—Es llamado gobernanza de la empresa familiar. A veces es llamado consejo familiar, y éste necesita tener una agenda, discusiones, crear reglas y políticas que le ayuden a funcionar.
¿Este consejo familiar necesita tener a alguien de afuera para funcionar mejor?
—No, no es necesario, pero sí puede ser muy útil para tener mayor cordialidad. Las familias tienden a ser más educadas y dispuestas si alguien de fuera se sienta a la mesa con ellos. Y eso es real.
Entonces no necesitas a una persona de afuera, pero muchas familias se benefician de tener a una persona trabajando con ellos.
¿Cómo lidiar con el talento? No todos están obligados a tener cualidades para los negocios.
—Si alguien está interesado en el negocio y se ve bien, podemos asegurarnos de que tenga la educación adecuada para que posteriormente se integre al negocio.
Necesitamos insistir en que trabaje en otra empresa tres o cuatro años para tener experiencia, para estar calificado para hacerlo bien.
Es necesario tener un programa de desarrollo dentro de la empresa.
Un poco de planeación y un par de este tipo de políticas de trabajar varios años en otra empresa para tener experiencia, por ejemplo, pueden hacer la diferencia y ayudar realmente.
Todos quieren ser tratados justamente, nadie quiere que tengan preferencias sobre otro, entonces de eso se trata la gobernanza familiar.
Vamos a crear las reglas para que la gente sea tratada justamente y para generar planes para nuestra carrera a largo plazo.
Y si no hay nadie con talento, ¿es posible traer alguien de afuera?
—Sí, si queremos seguir el negocio. Tienen que evaluarlo, si creen que no vale la pena y que es mejor vender la compañía, háganlo al tiempo que se considere correcto.
A veces la gente no confía en traer a alguien de afuera.
—Sí, es cierto, es un gran reto, es muy natural en las familias, entonces es importante entender tus competencias dentro de la familia, si tú tienes el talento, el interés para llevar la compañía bien, no hay problema; pero si no, tienes que decidir si van a contratar a alguien de afuera o vender la empresa.
Usted habla de 6% de crecimiento cada año. Muy ambicioso, ¿no?
—Sí, pero es un muy buen crecimiento y para lograrlo se necesita el mantra.
¿Cuál sería uno de los consejos más importantes para una empresa familiar?
—La familia tiene que estar preparada para organizarse, no es suficiente sólo manejar bien el negocio, tienes que mantener a la familia con estas reglas, o eventualmente la conducta de la familia va a debilitar la empresa. Se trata de estar juntos y organizados.
¿Otro consejo?
—Controlen el consumo de las utilidades del negocio. Necesitan hacer crecer su empresa, no necesitan darse dividendos que no puede permitirse la familia porque disminuye el crecimiento del negocio.
Entonces tienen que controlar el consumo del dinero del negocio.
¿Es una de las razones por las que las generaciones posteriores fallan al manejar la empresa?
—Sí, es una de las razones. Las familias crecen como los árboles de navidad, y en la tercera o cuarta generación realmente empiezan a crecer.
Entonces ahora tienes muchos miembros de la familia y ellos quieren buenas vidas, casas, y está bien siempre y cuando trabajen.
Esto debe ser así porque la compañía no puede permitirse darles mucho dinero, si lo hacen, éste no se puede reinvertir para hacer crecer los activos, es muy sencillo de entender matemáticamente.
Pero en la práctica ese proceso ya no es tan sencillo.