De acuerdo con la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas (Amasfac), sección Querétaro, al año se registran 11 mil siniestros vehiculares en promedio, en la entidad, lo que representa un costo de alrededor de 2 mil 273 millones de pesos, derivados de procesos ministeriales o judiciales, así como asistencia médica e indemnizaciones.
El presidente de ese organismo, Israel Calderón Gómez, quien representa a 29 aseguradoras existentes en el estado, refirió que de acuerdo con datos de 2012, casi 60% de los conductores que circulan lo hacen sin seguro, mientras que 100% de la población es víctima potencial de un accidente.
El costo promedio de una póliza de seguro automovilístico, de daños a terceros, es de 800 pesos anuales, mientras existen los de amplia cobertura que pueden ser desde los 4 mil pesos al año.
El representante del gremio dijo que por cada póliza con costo de 800 pesos, hay una obligación, por parte de la aseguradora, de cubrir al menos 750 mil pesos.
Consideró que ese tipo de pólizas son contratos basados en el principio de la mutualidad, donde se constituye un eficiente sistema de distribución de pérdidas, donde el monto acumulado de las primas pagadas por la colectividad asegurada, cubren las pérdidas de quienes sufren un siniestro.
“Por tanto, las ganancias o pérdidas son proporcionales al número de accidentes”, destacó.
Reiteró la importancia de contar con un seguro debido a que la libertad de los conductores debe estar limitada por el derecho de los demás, a no poner en riesgo su patrimonio y su integridad causada por un accidente.
Destacó que la previsión y la responsabilidad de los individuos son cualidades de sociedades avanzadas y el estado no es la excepción ante dichas situaciones.
En relación con el proceso legislativo de la iniciativa de Ley del Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio, para el parque vehicular del estado, que fue aprobada en 2012, manifestó que la ley beneficia a toda persona que maneje o no un vehículo, que circule y camine por las calles de la entidad.
Al contar con un seguro se tiene la tranquilidad de que su integridad y patrimonio no estarán desprotegidos ante un accidente automovilístico, brindando a las víctimas beneficios como la atención médica garantizada en caso de lesiones provocadas por incidentes e indemnizar a las víctimas en caso de pérdidas de miembros o incapacidades a familias, además de cubrir daños materiales, consideró.
