ExxonMobil dio a conocer la primera oferta comercial de combustibles en México que va a utilizar infraestructura privada en todos los eslabones de la cadena, en conjunto con sus socios nacionales.
“El objetivo es ofrecer el mejor combustible del mundo, directo de nuestras refinerías [en Estados Unidos] a los vehículos automotores mexicanos: un producto directo de fábrica”, dijo Carlos Rivas, director de Combustibles de ExxonMobil en México.
Al inaugurar la primera estación de servicio en Querétaro, dijo que la multinacional “viene a competir, pero también a construir e incentivar la inversión privada”.
La petrolera apuesta a abrir 50 gasolineras en el Bajío en los próximos cuatro meses, en sociedad con la firma mexicana Grupo Orsan.
“La idea es llegar a marzo de 2018 con este número de estaciones de servicio y ofrecer producto propio que se produce en nuestras refinerías”, comentó Martín Proske, director de Marketing de ExxonMobil.
De acuerdo con Rivas, la visión que se tiene es transformar el mercado de combustibles en México, algo en lo que seguramente se involucrarán los competidores.
“Las redes logísticas que estamos desarrollando ofrecerán al país la mejor calidad de combustibles, de mayor rendimiento y amigable con el medio ambiente”, detalló.
El combustible que ExxonMobil trae por ferrocarril mediante un contrato signado con Kansas City Southern México proviene de la refinería de Beaumont, Texas, lo que permite disponer de producto para atender la demanda no sólo de Grupo Orsan, sino de futuros aliados, explicó.
“Nos encargamos de hacer uno de los mejores combustibles del mundo ―Fuel Technology Synergy―, ahora disponible en México”, dijo Rivas.
Proske dijo que hay un plan para invertir 300 millones de dólares en el país durante la siguiente década, recursos que serán canalizados a tres áreas estratégicas: infraestructura (terminales de almacenamiento y transporte ferroviario), desarrollo de inventarios y publicidad.
El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, comentó que con la llegada de ExxonMobil a México el sector gasolinero se está modernizando a través del desarrollo de nueva infraestructura de distribución y almacenamiento de combustibles, y con la participación de nuevas marcas de estaciones de servicio.
La respuesta del sector privado ha sido importante y la industria “nos anuncia inversiones por 2 mil millones de dólares en los próximos tres años para el desarrollo de 40 proyectos de almacenamiento, lo que va a incrementar en 122% la capacidad actual”, manifestó.
El gran triunfo, dijo, es el de los consumidores, porque finalmente todos estos eslabones de la cadena que ha abierto la reforma energética y los muros que ha derribado, aterrizan en el consumidor. “Pasamos de una sola marca a 30 marcas, y esto es a favor de los consumidores”, recalcó Pedro Joaquín Coldwell.