Playa del Carmen. — El progreso económico y social de América Latina ha sido más tímido en los últimos años, lo cual es desafortunado por la persistencia de la elevada desigualdad de la región, aseguró el Nobel 2001 de economía, Joseph Stiglitz.
En conferencia de prensa del Foro Económico Mundial latinoamericano, el académico destacó los avances de la zona la década pasada, los cuales le permitieron disminuir la pobreza y elevar la tasa de crecimiento.
“Desgraciadamente, algunos de estos éxitos se han desacelerado en los últimos años”, mencionó.
Consideró que en un entorno donde se prevé un crecimiento económico más moderado será fundamental el rol y la contribución que realice el sector privado, para mejorar las condiciones de la actividad productiva.
Dijo que es fundamental que generen empleos, ya que una debilidad de América Latina es la falta de creación de trabajos y bajos salarios, factores que han aumentado la desigualdad.
“Es importante que el sector público se incorpore en esta agenda. Los líderes de la región deben persuadir sobre esta situación, porque la desigualdad es un problema global que debe ser atendido”, añadió.
El empresario y presidente del Consejo de Administración de América Móvil y Telmex, Carlos Slim Domit, dijo que es fundamental apostar recursos en tecnología, infraestructura y algunos sectores estratégicos como el energético, para mejorar las condiciones del continente y sus habitantes.
“En tecnología, el sector requiere mucha inversión y necesita que cada vez más empresas y personas generen innovación. Las telecomunicaciones son una herramienta sólida para promover el acceso en todas las áreas. El sector energético también dará una oportunidad para el desarrollo de los países y una mayor infraestructura será fundamental para generar sólidas tasas de crecimiento”, detalló.
Igualdad de género
En el acto, la empresaria Angélica Fuentes destacó que para impulsar un mayor crecimiento en América Latina se deben generar las condiciones para que las mujeres tengan una mayor participación en el mercado laboral.
Explicó que hoy el porcentaje de hombres que trabajan es de 80%; mientras que el de las mujeres es de 50%. Dijo que si se balancea esa proporción a 80-80 la productividad de la región aumentaría.
Agregó que para desarrollar el Producto Interno Bruto (PIB), el sector privado y la implementación de políticas públicas deben tener claro el concepto de la inclusión.