Ni desabasto ni aumento de precios para el consumidor mexicano, prevé la Asociación Ganadera Local de Porcicultores de Querétaro (AGLPQ), que preside la empresaria Marilú Ábrego Chávez, luego del arancel que la Secretaría de Economía anunció a las piernas y paletas de cerdo provenientes de Estados Unidos.
“Esta situación representa una oportunidad para fortalecer la planta productiva del país y reposicionar a la producción nacional en su participación en el consumo”, afirmó la dirigente estatal de los porcicultores, Abrego Chávez.
Comentó que ya se tienen firmados protocolos sanitarios y de intercambio comercial con países como Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Dinamarca, Chile, España, Francia, Alemania, Italia, Bélgica y Estados Unidos, de donde podrían provenir importaciones si fuera necesario.
“Cada año dijo Abrego Chávez, se gastan más de mil millones de dólares en la compra de pierna y espaldilla del exterior, tratándose de las sies fracciones arancelarias, el monto asciende a mil 500 millones de dólares; aunado a lo anterior, la porcicultura representa un detonante económico que genera 2.5 millones de empleos cada año a nivel nacional”.
Aseguró que “a la par del arancel, se abre la oportunidad para otras fuentes de suministro y los porcicultores mexicanos redoblen esfuerzos, para que la carne de cerdo mexicana esté presente en la mesa de los hogares de todo el país”.
Explicó que en el caso de las piernas y espaldilla de cerdo son productos que no tienen un mercado amplio en Estados Unidos, y que debido a esa razón entran a bajo precio a nuestro país, provocando una competencia desleal.
Esta semana la Secretaría de Economía dio a conocer la aplicación de impuesto a la carne de puerco proveniente de Estados Unidos como respuesta a la imposición de aranceles a las exportaciones de acero y aluminio mexicanos por parte de la Unión Americana.