Alan Greenspan, ex presidente de la Reserva Federal de EU (Fed), consideró que México requiere ajustes en su sector energético, de gas y aguas profundas.
Al participar ayer en la Sesión Plenaria del Consejo Nacional de la institución Banorte-Ixe, el ex funcionario de la Fed reconoció que en México debe haber capacidad de producción petrolera todavía no explorada y también en el Golfo de México en aguas profundas “...y conforme se puedan hacer modificaciones, serían de gran ayuda”, dijo.
Sin embargo, aseguró que entiende “la lógica respecto a las restricciones que hay en Pemex sobre la exploración y excavación”.
En el caso del gas, mencionó que en Estados Unidos “hay una gran revolución sobre este tema y en México también se hacen ajustes y creo que hay muchas oportunidades”.
Greenspan consideró muy importante que México mantenga una gran estabilidad macroeconómica y agregó que ante la volatilidad internacional actual, el país se beneficia por el hecho de que sus costos están estables y el tipo de cambio se ha movido para ayudarle.
En este mismo evento, el ex presidente de México Ernesto Zedillo aseguró que la economía mundial no ha logrado salir de la crisis de 2008 y hacia adelante se ven riesgos financieros que pueden convertirse en huracanes. “Hay nubarrones que comentaba el presidente (Ricardo) Lagos, pero yo diría que, más que nubarrones, son tormentas que están ahí y que pueden convertirse en huracanes”, enfatizó.
Zedillo dijo que los países latinoamericanos, entre los que se incluye México, no deben caer en “cierto grado de triunfalismo”, porque si bien no hay que minimizar o soslayar las fortalezas, tampoco hay que ignorar que la región latinoamericana es parte de una economía global.
El actual director del Centro de Estudios de la Globalización en la Universidad de Yale, aseguró que México y Brasil necesitan crecer a tasas más altas, ya que al ritmo actual no se logrará converger con países desarrollados y con Chile.
A eso, dijo, se suma que México aún no completa las reformas estructurales para impulsar y hacer más productiva a la economía. “Si no se hacen estaremos en muy serios problemas, con tasas de crecimiento insatisfactorias para enfrentar la competitividad y mejorar los niveles de desigualdad”, manifestó.
Por su parte, Enrique Peña Nieto, presidente electo, sostuvo que México puede convertirse en una potencia económica como consecuencia del escenario mundial y de la gran fortaleza de la economía nacional, al participar en una sesión de consejeros del Grupo Financiero Banorte-Ixe, que se realizó el martes por la noche en el Castillo de Chapultepec.
Destacó que mientras en el mundo se observan crisis financieras, México mantiene una condición de estabilidad económica y de salud en sus instituciones financieras.
“Creo que México pude transitar hacia mejores condiciones, hacia la consolidación de sus fortalezas y aprovecharlas, para ver materializado el anhelo de muchos mexicanos de tener un mejor país”, señaló.