En las tres últimas décadas en la mayor parte de los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) la participación en el ingreso antes de impuestos del 1% más rico de la población ha crecido de manera importante. En los países de la OCDE de habla inglesa, como en los denominados países nórdicos el crecimiento ha sido notable. La información es aportada por la Dirección de Empleo, Trabajo y Asuntos Sociales de la propia organización en un documento recientemente publicado. El punto de partida de los países nórdicos con relación a los de habla ingresa es notablemente diferente. En los primeros los niveles de concentración del ingreso eran menores y menor la participación del 1% más rico de la población en el ingreso total. Sin embargo, en ambos grupos de países se produce una concentración importante del ingreso en este reducido grupo de la población.
El incremento es el resultado de que el 1% más rico ha capturado una porción desproporcionada del crecimiento del ingreso total en el curso de las pasadas tres décadas. De acuerdo a la información de la OCDE, el top uno captura arriba del 37% en Canadá e incluso el 47% en Estados Unidos. Las cifras son desmesuradas. En el periodo de 1981 a 2012 el grupo del 1% más rico de la población en Estados Unidos pasa de obtener alrededor del 8% del ingreso a cerca del 20%. En el Reino Unido el aumento es semejante, llegando al 13%, desde el 6%.
En años recientes, con la gran recesión y la crisis global hay en principio una disminución en el ingreso que incluye al grupo del 1% más rico. En los años 2008 y 2009 hay una reducción del ingreso de este grupo de la población, particularmente más importante en el año 2009. Sin embargo, en 2010 el ingreso de estas personas vuelve a crecer en la mayoría de los países de la OCDE y se recupera con relación al nivel que tenía al inicio de la Gran Recesión. Por el contrario el 90% de la población con menores ingresos tiene su ingreso real estancado. Hay por tanto una continuidad en el proceso de concentración del ingreso, con el uno por ciento de la población cada vez más rico, capturando una gran parte de los beneficios del crecimiento. Las políticas ejecutadas para enfrentar la crisis global no han modificado el proceso.
La captura de una porción mayor del crecimiento del ingreso por el uno por ciento más rico se ha dado en el contexto de políticas que promueven la eficiencia de los mercados. Se impulsa la libre movilidad de capitales, se firman multitud de acuerdos bilaterales y de otro tipo sobre inversión que implican mayor apertura. En muchos países se privatizan empresas públicas y más recientemente se reducen o eliminan componentes importantes del Estado del bienestar. Las finanzas públicas deben disminuir gastos en seguridad social, pero no se aplica el mismo criterio al momento de pagar intereses de la deuda. Hay que realizar pagos en salud, se aumentan las cuotas en educación pública, mayormente al cursar estudios universitarios, se incrementan las edades de jubilación. Pero los intereses deben cubrirse y avanzar con firmeza al equilibrio fiscal.
La concentración del ingreso en manos de este reducido grupo del 1% de la población es el resultado de la forma en que están funcionando las economías en los miembros de la OCDE. Más grave es que las políticas ejecutadas para enfrentar la Gran Recesión y la Crisis Global no han permitido el restablecimiento de un firme y sostenido crecimiento económico; menos aún la recuperación en el empleo formal. En varios países se mantienen altísimas cifras de desempleo, mayores en el caso de los jóvenes. Frente a ello se insiste en continuar con la misma política económica. Por tanto, no será sorpresa que en unos años más la concentración del ingreso en el segmento del uno por ciento de los más ricos será mayor. Pero también será más difícil que las economías crezcan.
* Departamento de Economía. Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa