Tal y como lo adelantó EL UNIVERSAL, los cinco miembros de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) autorizaron la publicación de su declaración de intereses que ya aparece en el portal del instituto central.

Sin embargo, no sucedió lo mismo con algunos directivos como los responsables de la Unidad de Transparencia, y en otros casos todavía estaban en proceso cuando el plazo para entregarla concluyó en abril pasado.

Banxico difundió en su portal de internet, las declaraciones de intereses de los miembros de la Junta de Gobierno en las cuales cuatro de los cinco integrantes revelan que ellos ni sus cónyuges o dependientes económicos tienen algún vínculo o cargo en asociaciones o empresas que represente un problema para el desempeño de su trabajo en política monetaria.

Sólo el subgobernador Roberto del Cueto reporta que participa de manera voluntaria como miembro de la mesa directiva en la Fundación de la empresa ID Ingeniero Manuel Franco López A.C. de la Ciudad de México, que se dedica a la manutención de estudiantes destacados de escasos recursos, matriculados en la carrera de Ingeniería de Minas y Metalurgia de la UNAM.

No autorizaron. Entre los casos de los que no dieron su autorización para hacerla pública se encuentra la titular de la Unidad de Transparencia, Claudia Álvarez Toca, la gerente de análisis de Planeación de Transparencia, Mónica Belén Díaz, y el gerente de Transparencia, Carlos Eduardo Cicero Lebrija.

Tampoco dio su anuencia, la directora general de Sistema de Pagos y Servicios Corporativos, Lorenza Martínez, quien es esposa del expresidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Guillermo Babatz, hoy miembro de la junta directiva de Scotiabank en México y gerente socio de Atik Capital, consultoría especializada en la estructuración de soluciones financieras.

De igual manera no quiso el director general de Estudios Económicos, Daniel Chiquiar, ni el director jurídico, Luis Urrutia, extitular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y el gerente de comunicación Interna, Adolfo Gutiérrez.

En el caso de los que no dieron su venia para publicarla se expuso lo siguiente en el portal del Banxico:

“El servidor público presentó en tiempo y forma su declaración de intereses, de conformidad con las ‘Reglas para la Presentación de Declaración de Intereses de los Servidores Públicos del Banco de México’. En términos de la información declarada bajo protesta de decir verdad, no existen intereses en conflicto que puedan afectar el desempeño imparcial de su empleo, cargo o comisión, el cual, en el ejercicio de los derechos previstos en las citadas Reglas, optó por no autorizar la publicación de su declaración de intereses”.

Entre los que están en proceso de publicarla, se encuentra el director general de Estabilidad Financiera, Pascual O’Dogherty Madrazo.

Dan aval. De los directivos que expresaron que no tenían ningún inconveniente en difundirla, destaca el director de Relaciones Institucionales, Dionisio Meade y García de León, quien es padre del secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade y del secretario Ejecutivo del IPAB, Lorenzo Meade. Declaró no tener ningún conflicto de interés. El director de Vinculación Institucional, Oscar Durán, la publicó y no tiene conflicto, al igual que en el caso del subgerente de Vinculación Social, Pedro Garza.

Con licencia. Hay un apartado especial en el que se menciona a funcionarios que están en calidad de comisionados en otras dependencias del sector público o entidades. Tal es el caso de Alberto Torres, quien fungía como director general de Investigación Económica y hoy es el titular de la Unidad de Crédito Público en la Secretaría de Hacienda. Torres no autorizó la publicación de su declaración de intereses.

En cambio, Julio Santaella, quien era el coordinador ejecutivo del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilidad y el Desarrollo y hoy es presidente del Inegi, sí aceptó difundirla, y declara que no tiene conflicto.

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