Los trenes de la Línea 12 arrendados a la empresa española Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), no se apegan de manera correcta en la vía, confirmó el resultado de los Estudios y Plan de Investigación que elaboró Ingenierie des Systèmes de Transport Public Urbain/Ferroviaire (SYSTRA).
El contrato-convenio que suscribió CAF de México por 15 años y que se realizó bajo la modalidad de Prestación de Servicios (PPS) por un monto superior a 18 mil millones de pesos, establece que “los riesgos operativos se trasladan a la compañía”.
Sin embargo, SYSTRA propone cambiar los rieles de las curvas, las placas de sujeción de los rieles, así como una parte de los durmientes, el balasto y reducir el peralte de las curvas.
SYSTRA, empresa especializada en sistemas ferroviarios y de metro, advirtió sobre deficiencias en el proyecto por la compatibilidad tren-vía. Los defectos se incrementaron por la falta de mantenimiento; “hubo una tardía atención para controlar el desgaste ondulatorio prematuro”, confirmó el reporte que presentó Colás Martinet, vicepresidente para América Latina de esa compañía.
El programa de simulaciones informáticas y pruebas en el terreno de SYSTRA aseguró que, a nivel de material rodante, la mala inscripción de los bogíes en las curvas, la mala ubicación del sistema de lubricación de las ruedas, la relación de dureza rueda/riel y las vibraciones excesivas de los ejes de los trenes, generaron un desgaste ondulatorio exponencial.
A nivel de vía, el reporte explica que “15 de las 36 curvas del tramo en viaducto que se estudió tienen un radio inferior a los 350 metros, situación que dificulta la inscripción del tren y provoca de manera determinante un desgaste ondulatorio”.
En la presentación del informe, Colás Martinet detalló: “de hecho, las simulaciones, los ensayos y la experiencia, demuestran que el elemento determinante en la causa del desgaste ondulatorio es la deficiente compatibilidad entre el material rodante de este tipo y curvas inferiores a 350 metros”.
SYSTRA detalló que el diseño presenta un problema de compatibilidad entre el peralte de la vía y la velocidad de circulación de los trenes en siete curvas y “aunque por razón de seguridad, las reducciones de velocidades fueron inevitables ante los desgastes en los trenes y la vía, estas reducciones agravaron la problemática de la Línea 12.