Luis Videgaray asegura que la clave de un secretario de Hacienda es actuar con responsabilidad y tomar las medidas que más le convengan a un país, pese a que no sean las más populares.
En entrevista con EL UNIVERSAL en Lima, Perú, el responsable de las finanzas públicas admite que el populismo, como política pública, propone soluciones fáciles y que suenan bien, pero que en realidad generan un problema mayor en el futuro.
“Es una ruta irresponsable que mete al país en problemas muy graves. Si bien en un principio son soluciones que parecen atractivas, e incluso pueden ser populares; creo que en México hemos tenido episodios, brotes populistas y a la larga han salido muy caros para el país”.
Después de participar en la reunión de otoño, que organizan el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, el funcionario afirma que en los últimos años México ha optado por la responsabilidad.
“No necesariamente siempre es el camino más aplaudido, pero a la larga, no tan larga, es el camino que más le conviene a México.
“Hemos logrado mucho como país, tanto el gobierno de Enrique Peña Nieto y desde antes y sería francamente una pena para el país que cayéramos en la tentación de políticas populistas, ya sea de izquierda o derecha, porque hay varios tipos que al final de cuentas lo que venden es un espejismo y no una realidad”.
Videgaray reconoce que para él es un honor ser el titular de Hacienda y afirma que se trata de un trabajo fascinante, y un privilegio, aunque admite que no es para toda la vida.
Asegura que su referente como secretario de Hacienda es Pedro Aspe por los logros que alcanzó durante su gestión (entre 1988 y 1994 en el sexenio de Carlos Salinas); sin embargo, manifiesta que siente admiración por Antonio Ortiz Mena.
Revela que su familia es muy cercana y nunca le ha pedido a su hermano Eduardo, comunicador, que no lo critique en sus programas.
