La modernidad nos obliga a tener que manejar una gran cantidad de información; sin embargo, esa misma situación nos pone en riesgo de ser víctimas de robo de identidad o de un fraude a nuestro nombre si no se pone atención en el uso de información confidencial de cada una de las personas, por ello, es muy importante que ponga atención sobre cómo es que se deben de cuidar los datos personales para evitar sorpresas desagradables.
Hay que diferenciar los datos personales de la información financiera clave, donde el primera se refiere a toda la información relativa a un individuo que lo identifica, como su origen, edad, lugar de residencia o cualquier tipo de trayectoria, ya sea académica, laboral o profesional.
La información financiera son los datos que permiten conocer la composición o variación del patrimonio de una persona en un momento o periodo determinado contenida en los estados de cuenta, transacciones y transferencias electrónicas, saldos, número de cuenta, usuario y contraseña para el acceso en línea.
De esta forma, con el uso intensivo de internet, es muy frecuente que en las páginas en las que se navegan que requieren algún tipo de suscripción, se pida nuestra información personal, como la dirección del domicilio, números de teléfonos fijos y móviles, nombres de personas conocidas y si se está realizando la compra de algún artículo o servicio, solicitarán el número de la tarjeta de crédito o débito y el número verificador para poder llevar a cabo la transacción, pero con esto se corre el riesgo de que puedan obtener números y claves que permitan a los delincuentes robar su dinero.
Si bien el comercio en línea está creciendo de manera exponencial en el mundo, debe de cuidar a quién proporciona la información y que tipo de datos son los que puede dar y cuáles son los que puede reservarse.
No envíe por correo electrónico datos personales que lo identifiquen, por ejemplo, números de cuenta, de tarjeta de crédito, o números de identificación personal. Recuerde que los bancos jamás le enviarán un mensaje de correo electrónico solicitando este tipo de información, por lo que en caso de que reciba uno de ellos elimínelo de su ordenador y avise personalmente al banco de este tipo de correos.
Si lo que desea es realizar compras en línea, elija una tarjeta bancaria con un límite de crédito bajo, para que no llame la atención de los ciberdelincuentes, así como evite en lo posible realizar grandes operaciones que involucren fuertes sumas de dinero.
Asimismo, no descargue archivos de desconocidos ni seleccione los enlaces de gente que no conoce, además de que es recomendable instalar un cortafuegos (firewall) en su computadora, que es un programa que protege de intrusos en tiempo real, además de tener un software antivirus un programa antiespías (spyware). Recuerde que lo que está en juego son sus datos y su dinero.
Verifique que haya un símbolo de transacción segura (el ícono es un candado) en la esquina inferior de su programa de navegación, ya que con esto se certifica que la página que está visitando está debidamente registrada como un sitio web y no como una página apócrifa.
Identifique que el portal de internet del comercio tenga el logotipo de la AMIPCI (Asociación Mexicana de Internet); lo cual indica que el comercio es un sitio registrado y debidamente establecido, con un lugar físico conocido.
Desconecte totalmente de cualquier sitio web tras efectuar una transacción en línea con tarjeta de crédito. Si no hay una función de “desconexión”, cierra el programa de navegación para evitar el acceso a tus datos personales sin autorización.
Atención con vendedores
La venta a domicilio es un método ancestral que utilizan muchos comercios, sin embargo, la delincuencia ha usado estas y otras formas para conocer información de los particulares, ya sea personal o financiera.
Por ello, a menos que haya iniciado el contacto, nunca facilite a nadie, información confidencial, hasta que esté plenamente convencido de su identidad, empresa que representa y el producto que está ofreciendo.
Tenga cuidado cuando reciba a personas que buscan encuestarlo. Recuerde que debe portar la identificación de la empresa encuestadora y no responda a preguntas que se refieran a detalles de su vida diaria, como el tiempo que pasa fuera del hogar.
Lo mismo sucede cuando alguien llama por teléfono ofreciendo productos sin que usted lo haya solicitado, por lo que no responda a sus preguntas y limítese a ser cortés y colgar.
Para evitar la llamada de los vendedores honestos y que estos se confundan con los ladrones, puede pedir a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, en el caso de los servicios financieros, que lo saquen de todas las listas para promocionar los productos, con lo que estará seguro que ya no le marcarán para promocionarle tarjetas de crédito.
Finalmente, recuerde que el principal control de su información es usted mismo, así, si percibe cierta desconfianza hacía la el lugar o persona que busca contactar con usted, es mejor no acercarse.