Tres años después de que el número de autos usados procedentes de Estados Unidos a México llegara a un máximo de 1.5 millones anuales, la Administración General de Aduanas (AGA) dice tener “bajo control” el ingreso de éstos.
Entre enero y agosto de este año se reporta el ingreso de sólo 101 mil 300 vehículos, 72% menos que lo observado en el mismo periodo de 2014, informa el responsable de aduanas en el SAT, Ricardo Treviño.
El mejor control sobre los autos usados que ingresan se debe a los mayores requisitos que se piden así como a la revocación de 37 de los 51 amparos que se interpusieron para internar autos.
La AGA negocia con la institución homóloga estadounidense (la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, CBP, por sus siglas en inglés) un acuerdo a través del cual se va a compartir la base de datos sobre los antecedentes de los vehículos de ese país, a fin de conocer si las unidades están involucradas en algún hecho delictivo. El acuerdo puede firmarse este año, con lo que se espera mantener en el mínimo la importación de esos autos.
Treviño afirma que se lograron frenar los 51 amparos con los que entraron más de 3 millones de automóviles usados desde 2008 hasta la fecha.
¿Está bajo control la entrada de autos usados de EU a México?
—Recordemos que el Decreto por el que se establecen las condiciones para la importación definitiva de autos usados fue el 24 de diciembre de 2008 y su prórroga el 28 de diciembre de 2010, porque desde 2005 se registraba una importación de vehículos usados bastante considerable, llegando a comprarse más autos en 2012 que los que vendió la industria nacional en el país.
Desde 2013 se empieza a implementar la regla de horarios, donde se restringe la importación a ciertas horas. Luego se exige que CBP acredite que el automóvil a importar no esté involucrado en un hecho delictivo, un procedimiento llamado shipper export.
Posteriormente se publica el mecanismo para el pago de mercancía sujetos a precios estimados de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público el 31 de diciembre de 2014.
Aunado a estas medidas de control, el SAT revisa la investigación procesal y la investigación documental de los juicios de amparo para presentar la documentación necesaria que permita agilizar la emisión de sentencia en los juzgados de distrito.
En 2012 fue el punto más álgido de importación de vehículos, con casi 1.5 millones de unidades. Ahora, del 1 de enero al 31 de agosto de 2015 la cifra es de 101 mil 300 unidades importadas.
Si se compara esta cifra de 2015 con el mismo periodo del año pasado, registramos una baja de más de 72%. En 2014 reportamos 451 mil unidades importadas.
De los 101 mil 300 vehículos que se importaron en los primeros nueve meses de este 2015, sólo 25% tuvo acceso con amparo.
Se ha hecho una estrategia directamente en los juzgados para agilizar las sentencias y le han dado la razón a la autoridad. Por eso, prácticamente las importaciones con la figura de amparo disminuyeron. El resultado es que en el último mes no se han tenido ni una sola importación a través de un juicio de suspensión.
¿Cuántos juicios de amparo se abrieron para eludir el decreto de 2008 y cuántos siguen vigentes?
—Eran 51 suspensiones definitivas conocidas como juicio de amparo con las que se tramitaban las importaciones de autos, y a la fecha ya se resolvieron 37 a favor de la autoridad y hay 14 pendientes de resolución pero que ya no han operado por diversas inconsistencias que presentaron, lo que detuvo este fenómeno.
¿De los autos importados en lo que va del año, han entrado al país conforme lo marca el decreto?
—El 75% de las operaciones entraron cumpliendo lo que dice el decreto de 2008. Desde esa fecha y hasta ahora, las unidades que entraron al país con amparo fueron cerca de 3.5 millones de unidades. En su momento más de 90% entraron con amparo. En 2015 que se controla la figura y ahora la mayoría de las unidades entran como lo dice el decreto.
¿Estamos entonces ante la máxima cifra de autos que se puede importar anualmente cumpliendo los requisitos de ley?
—Es lo que se refleja en estos meses y el gobierno entiende que puede haber una demanda para estos bienes, pero la situación es que hay que encontrar los controles y los mecanismos para traer solamente los automóviles que puedan ser utilizables sin dañar el medio ambiente ni la infraestructura del país. Hay que hacer algún estudio para ver realmente cuál es la demanda de este tipo de bienes. Vemos el incremento constante de la venta de vehículos en el mercado nacional, por las medidas que se han tomado para frenar la importación de vehículos, además de los programas que han lanzado la industria automotriz, y esto es en beneficio del empleo formal en el sector automotriz y de todo el país. Muchos compradores de vehículos usados fueron engañados por comerciantes que les vendieron unidades que no cumplen con la normatividad, porque les vendieron autos que entraron con amparo.
¿Qué otras medidas se van a imponer para frenar la entrada de autos usados al país?
—Lo que sigue es fortalecer las medidas de control en cada una de las aduanas y regular más las operaciones. Estamos en pláticas con la contraparte de la CBP para tener el acceso a ciertas bases de datos que ellos concentran y que son propiedad de diversas dependencias de ese país. Ahí podemos consultar el histórico, el estatus de cada automóvil, para que en el momento en el que se presente una importación evaluemos las condiciones físico-mecánicas, emisión de contaminantes y sobretodo su estado legal para asegurarnos que no esté involucrado en un hecho delictivo. De esta forma tendremos más información para determinar si se permite importar un vehículo.
¿Cuándo entrará en vigor el acuerdo con las autoridades aduaneras de Estados Unidos?
—No tenemos fecha específica, todavía es un tema que tiene que resolver el gobierno de Estados Unidos porque tiene que compartir información y tienen que revisar la normatividad para permitir a las autoridades mexicanas consulta regularmente esos datos. El intercambio de información será recíproco y constante aunque hay que reconocer que la problemática de la importación de vehículos usados en mal estado es más un problema para las autoridades Mexicanas.
¿Quiénes utilizaron los amparos para importar autos usados?
—Agentes aduanales involucrados en la operación. Se detectaron 54 y se les canceló la patente a 26; se suspendió a siete y dos fallecieron. Los restantes operan regular, pero queda claro que ya no usan los amparos para internar vehículos.