La desocupación de 6.3% en el estado, registrada en el último trimestre de 2013, se debe en gran medida a la migración de ciudadanos a Querétaro que provienen de otras estados, y que demandan más oportunidades de empleo, comentó el secretario del Trabajo local, Israel Carboney Morales.
El funcionario dijo que en promedio llegan entre 40 y 45 familias por día a la entidad.
En entrevista, reconoció que también continúa la práctica de los patrones que dan de baja a sus empleados y los recontrata en enero, por lo que para el cierre del año se reporta un crecimiento en las tasas de personas que no tienen trabajo.
Comentó que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) considera como desocupados a aquellos que trabajan menos de 15 horas a la semana, así como a quienes buscan un segundo o tercer empleo para obtener mayores ingresos.
Destacó que otro uno los problemas que está enfrentando la entidad es que las empresas de outsourcing, que ofrecen servicio a las empresas de la localidad, están registradas ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en otras entidades, por lo que el número de trabajadores se toma en cuenta por el lugar del registro.
“La gente está trabajando físicamente en la entidad, tenemos problemas del IMSS, ya que los patrones están dando de baja a sus empleados y contratando por outsourcing que están cotizando en otras entidades”, declaró Carboney Morales.
El secretario de Desarrollo Sustentable (Sedesu), Marcelo López Sánchez, coincidió en que el incremento de la tasa de desocupación en el estado se debe a la presión migratoria y al aumento de la Población Económicamente Activa (PEA).
“Por un lado hay crecimiento, generación de empleos y de inversión, hay formalidad, pero por otro lado también hay una presión importante por parte de la migración”, expuso.
Recordó que el tercer trimestre del año pasado, el alza de la población mostraba cierta estabilidad en el tema migratorio, pero a finales de 2013, la población creció de manera importante.