La economía de Querétaro se encuentra en mejores condiciones que la mayor parte del país, para enfrentar las situaciones adversas del 2018, consideró Arturo Muñoz Villalobos, presidente del Colegio Queretano de Economistas.
El 2018 será un año de incertidumbre para los agentes económicos debido a la renegociación del TLCAN, la reforma fiscal en EUA, el menor crecimiento económico a nivel global y las elecciones presidenciales
Ya en 2017 la incertidumbre económica por el efecto Trump se manifestó con una menor llegada de capitales al estado provenientes de Estados Unidos. De acuerdo a la Secretaría de Economía (SE) la Inversión Extranjera Directa (IED) proveniente de Estados Unidos disminuyó 25% en los 3 primeros trimestres del 2017, respecto al mismo periodo del 2016.
Disminución
En los 3 primeros trimestres de 2016, Estados Unidos invirtió en la entidad 342 millones de dólares, mientras que en el mismo periodo de 2017, lo hizo por 254 millones de dólares; es decir, 87.5 millones de dólares menos.
No obstante, la inversión total que llegó a México en 2017 aumentó en 11% debido a la mayor inversión de países como Alemania y Canadá. En 2017 se concretaron en Querétaro un total de 56 proyectos de inversión por más de 14 mil millones de pesos, de acuerdo al balance de actividades de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SEDESU).
Arturo Muñoz, destacó que la reciente inversión de Safran en Querétaro, por 75 millones de dólares para construir su sexta planta, es una muestra de que la confianza en el estado aún es sólida.
El crecimiento del empleo formal en la entidad en 2017 fue del 8%, medido por los trabajadores inscritos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). De 499 mil personas en diciembre de 2016, se reportaron 549 en el mismo mes de 2017, de acuerdo a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS). Para 2018, el economista previó un más aumento laboral, aunque un posible menor empuje.
Previó que el crecimiento económico de Querétaro seguiría por encima de la media nacional del 3% aunque reconoció que el crecimiento se ha desacelerado. De acuerdo al Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) el ritmo de crecimiento en los primeros trimestre del 2017 fueron superiores a los de 2016. Sin embargo el estado no alcanzó el ritmo de crecimiento de más de 7% anual de 2015.
Muñoz destacó que en los últimos 4 años la economía queretana ha crecido por encima del 5% debido a condiciones internas del estado. Estas condiciones como la fortaleza del empresariado, gobierno y universidades, evitarán un impacto negativo frente a las condiciones externas, del 2018 y un crecimiento por encima del promedio nacional, auguró.
La adversidad de 2018
La renegociación del TLCAN ya no causa la incertidumbre que causó en los primeros meses del 2017, aseguró. Dijo que la retórica de Trump que amenaza con abandonar el tratado es sólo una estrategia de negociación. Además destacó que dentro de Estados Unidos, los grupos a favor de la permanencia son muy superiores, por lo que es improbable la salida de nuestro principal socio comercial.
Recordó que el partido conservador de Estados Unidos –al que pertenece Donald Trump- firmó una carta en enero de 2018 pidiéndole no abandonar el TLCAN. El documento fue promovido por el senador Mitch McConnell y 35 senadores republicanos más.
Sin embargo auguró que la incertidumbre por las renegociaciones del TLCAN se mantendrán hasta 2019. Dijo que el tratado original se tardó 4 años en negociarse, lo que muestra la ardua labor del proceso. Por otro lado, las elecciones presidenciales en México detendrán las negociaciones hasta el siguiente año.
La incertidumbre referente al TLCAN podría mantenerse más allá de 2019 y podría volverse institucional si se aprueba la cláusula de extinción de tratado. En la cuarta ronda de negociación se propuso incluir una cláusula que obligara a las partes a renovar el tratado cada cinco años. El economista Queretano dijo que de establecerse dicha cláusula se generaría incertidumbre de forma periódica, limitando la inversión y flujos comerciales entre los países.
Respecto a los impactos de la reforma fiscal en Estados Unidos, recomendó que México no debe adelantarse a tomar medidas en un escenario que no está claro. Pretende disminuir la tasa al impuesto corporativo de 35% al 20% para favorecer a los capitales estadounidenses regresen al país.
Dijo que esta política puede traer consecuencias positivas en el largo plazo, pero implica Estados Unidos aumenté su déficit presupuestal al tener que conseguir otra forma de financiar el gasto público.
México podría bajar igualmente la tasa de impuestos para hacer más atractivo el país a los capitales extranjeros, pero esto significaría que la disminución en ingresos públicos deberían de ser compensados de otra forma, aseguró. El país ya tiene una gran deuda, por lo que es difícil aumentarla, e incrementar las tarifas a los consumidores, sería popular, puntualizó.
En cuanto a los cambios estructurales internos que se podrían suscitar en el país, luego de las elecciones presidenciales, dijo que no serían radicales. Aunque López Obrador llegase a la presidencia, éste ha prometido la independencia del Banco de México, austeridad fiscal y respeto a los acuerdos comerciales internacionales. Debido a lo anterior no sería el sucesor de Hugo Chávez, aseguró.
Debido a lo anterior, Querétaro estaría seguro de poder mantener su modelo de desarrollo hasta la fecha. No obstante aceptó que en el estado y en México faltan cambios por hacer como mejorar la seguridad, más fácil el emprendimiento de negocios, eliminar la corrupción y limitar el poder monopólico de ciertos grupos. En cuanto a política macroeconómica dijo que el Banco de México debe no sólo mantener la estabilidad financiera sino también promover el crecimiento.
