La certidumbre fiscal y contractual son factores básicos en la Ronda Uno de licitaciones del sector petrolero, pues para atraer inversiones no será suficiente contar con criterios cuantitativos como la riqueza geológica, aseguraron los coordinadores del Grupo de Trabajo de Energía del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi), Andrés Rozental y Mario Gabriel Budebo.
Esto implica consolidar la autonomía y fortaleza de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, de la Comisión Reguladora de Energía y de la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, las cuales deberán manejarse con total transparencia, dijeron. “Que se parezca a la percepción que se tiene del Banco de México”, expuso Budebo.
Sin embargo, pese a que se dará mayor certidumbre a las empresas participantes al contar con un programa quinquenal, para esta Ronda Uno será difícil que se adjudique la totalidad de los campos, reconocieron.
Se anticipa que solamente se asignará entre 30% y 40% de los 14 bloques por licitar, como llega a ocurrir en otros países, al igual que estima Petróleos Mexicanos (Pemex). Esta baja proporción en la asignación ocurre también en diversas partes del mundo, por lo que no se puede medir el éxito de la reforma solamente basándose en ese porcentaje.
Hay tres criterios que son importantes: el número de participantes y sus inversiones, la creación de un horizonte de oportunidades y la construcción de un ambiente de certidumbre en la implementación de las reglas, de los tiempos y de procesos regulatorios.
Se debieran saber los montos de inversión comprometidos, independientemente del número de bloques asignados.
“Debemos cerciorarnos de que en cada convocatoria están participando y ganando las compañías más reconocidas para el tipo de recursos licitados”, explicaron a través de un documento de análisis.