México requiere que se mejore la seguridad física y la cultura de la legalidad, pues sin esos elementos no se va a tener el país que se anhela, aseguró el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón.
Luego de tomar protesta como nuevo líder de la cúpula empresarial, dijo que para promover la productividad y prosperidad de la iniciativa privada hace falta una reforma fiscal e incentivos, pero añadió que es necesario que haya el cumplimiento gubernamental en los pagos a proveedores y simplificación administrativa.
“Para que las empresas florezcan y las personas nos desarrollemos, necesitamos un entorno de confianza y de certidumbre”, por ello hace falta tener un sólido Estado de derecho, abundó el dirigente.
Castañón, ex líder de la Confederación Patronal de la República Mexicana, planteó al presidente Enrique Peña Nieto, quien estuvo presente en el evento, tres propuestas para crear una agenda de desarrollo para el país.
En primer lugar mencionó que se debe generar un esquema normativo que se adapte a cada sector, con el fin de que los empresarios destinen más tiempo en hacer crecer sus negocios y a sus trabajadores, en lugar de pasar gran parte de los recursos en cumplir con trámites burocráticos.
Como segundo punto pidió ofrecer al sector privado mejor acceso al capital e incentivos con financiamiento competitivo para la reconversión industrial y comercial.
“Estamos dispuestos a invertir recursos, talento y requerimos apoyos que garanticen inversión de largo plazo”, por lo que reiteró que hace falta trabajar en una reforma hacendaria.
Por último, comentó que se debe promover el acceso a la innovación y conocimiento, de manera que se construya un entorno propio para que las empresas crezcan.
El empresario advirtió que con inseguridad física y patrimonial, así como con falta de aplicación del Estado de derecho no se va a tener la patria que se anhela.
Durante la ceremonia, Juan Pablo Castañón dijo al jefe del Ejecutivo que los empresarios están dispuestos a invertir recursos y talento de largo plazo, pero se requiere apoyos que garanticen los proyectos.
Comentó que uno de los grandes rezagos que tiene el país es la pobreza y la desigualdad, por lo que las reformas estructurales que se aprobaron en años pasados deben de llevar beneficios tangibles a las familias del país.
Dijo que es indispensable que las instancias de gobierno paguen a los proveedores los contratos porque se ponen en riesgo miles de empleos y empresas. Añadió que de hacerlo se va a tener confianza mutua.
A la toma de posesión asistieron los titulares de las secretarías de Desarrollo Social; Educación; Energía; Gobernación; Hacienda; Turismo, entre otros funcionarios.
Asimismo, al acto acudieron los gobernadores del Estado de México, Oaxaca, Querétaro, Sinaloa, Tlaxcala y el jefe de gobierno del Distrito Federal.
En el evento, el presidente saliente del CCE, Gerardo Gutiérrez Candiani, dijo que el sector privado trabaja por tener un país con mayor desarrollo y crecimiento y por ello laboran junto con el gobierno para “incidir positivamente” en las mejoras.
El ex dirigente afirmó que durante sus tres años al frente del CCE trabajó con la agenda por México en la que se plantearon 65 puntos, de los cuales se cumplió con 59%, quedando pendientes en crecimiento y desarrollo, ambiente macroeconómico, seguridad social, inseguridad, Estado de derecho y democracia.