Tener un título de propiedad debidamente registrado es fundamental para poder hacer el trámite de escrituración y con ello asegurar su patrimonio.
Una manera de identificar si una propiedad tiene irregularidades, es cuando el vendedor elabora un contrato de compra-venta muy deficiente, con pocas especificaciones legales y mal redactado.
El notario público, José Luis Rueda Trujillo, aseveró que actualmente muchas personas son engañadas y compran propiedades que presentan serias irregularidades, donde no cuentan con la autorización para construir fraccionamientos, no hay acceso a servicios básicos o muchas veces son terrenos ejidales.
Por ello, recomendó que antes de comprar cualquier terreno o propiedad, las personas deben acudir ante un notario público que los asesore sobre si está o no, en regla el inmueble. Esta atención por parte del notario muchas veces es gratuita.
Y es que, algunos “enganchadores” prometen al comprador que en un tiempo se va a regularizar el predio, sin embargo Rueda Trujillo dijo que esas son mentiras.
Precisó que al menos dos personas a la semana acuden a la Notaría número 12, de la cual es titular, con este tipo de problemas.
No obstante, además de atender la legalidad del predio, si una persona tiene sus documentos en orden, como su identificación oficial vigente, está al corriente con el pago del predial y cuenta con acta de matrimonio o divorcio en regla, si es el caso, no tendrá problemas para llevar a cabo el proceso de escrituras de una propiedad, aseguró el notario público, Leopoldo Espinosa Áreas.
El titular de la Notaría número 10, calculó que la elaboración del documento de escritura puede durar de tres a cinco días, sin tomar en cuenta los trámites que se tiene que hacer ante las instituciones públicas.
Explicó que el proceso es rápido a excepción de las temporadas vacacionales, cuando el Registro Público de la Propiedad y del Comercio (RPPC) puede tardar hasta una semana en hacer el trámite, debido al mayor flujo de personas.
Por su parte, Rueda Trujillo agregó que el proceso aprobado por las instituciones debidas debería de durar un mes, pero en la actualidad se extiende entre dos a tres meses, debido a la sobresaturación y poco personal con que cuentan las dependencias para llevar a cabo los estos trámites.
Ambos especialistas precisaron que si una persona no tiene sus documentos en orden el proceso puede retrasarse.
Cuidado con los costos adicionales
Albina Torres Preciado, quien hace poco tramitó sus escrituras, acudió a un notario y al entregar el título de propiedad le indicaron que no contaba con el folio del Registro Público. La búsqueda de ese documento tardó más de ocho meses y tuvo un costo adicional de mil 500 pesos.
Por eso, los notarios recomiendan siempre buscar la asesoría de un abogado que revise el título de propiedad, así como el contrato de compra-venta.
Asimismo, al término del proceso de escrituración es recomendable que el cliente asista con su abogado para escuchar la lectura de las escrituras, y revise a detalle el documento para evitar que posteriormente se encuentren errores e impliquen costos extras.
