Los problemas de Petróleos Mexicanos (Pemex) no se acaban con la inyección de recursos que la Secretaría de Hacienda le está otorgando.
De acuerdo con datos de la petrolera, la falta de recursos para invertir en actividades productivas, por los recortes presupuestales ordenados por las propias autoridades hacendarias desde 2014, le está cobrando factura no sólo a la empresa sino al país.
En los últimos tres años, cada recorte ha obligado a ajustar a la baja las metas de producción de petróleo:
En 2014, fueron 40 mil millones de pesos y se sacrificaron 91 mil barriles diarios de aceite; en 2015 fueron 62 mil millones de pesos y en extracción fue de 112 mil barriles; en 2016 son 100 mil millones de pesos y la meta se ajustó en 124 mil barriles; para 2017 aún se desconoce el recorte a Pemex pero la plataforma de producción bajará en 95 mil barriles diarios más.
Entre 2014 y 2017, México dejaría de producir 398 mil barriles diarios por los recortes al presupuesto de Pemex, que a los precios actuales de la mezcla (32.24 al 15 de abril) representan 18 mil 731 millones de dólares, unos 331 mil 538 millones de pesos, monto superior a los ajustes de gasto a Pemex estimados en 202 mil millones.
En los primeros 10 días de abril de este año, la producción de petróleo crudo se situó debajo del umbral de los 2 millones 200 mil barriles diarios, un nivel que no se veía desde 1980.
Los reportes de Pemex Exploración y Producción revelan que la plataforma de producción promedia 2 millones 190 mil barriles al día.
Lo mismo ocurre con los niveles de extracción de gas, que se han venido reduciendo y con altas probabilidades de que se ubiquen debajo de los 5 mil millones de pies cúbicos en los próximos meses, un nivel que tampoco se veía en los últimos 11 años.
Al arranque del cuarto mes del año, México está produciendo 5 mil 38 millones de pies cúbicos de gas (únicamente el hidrocarburo y excluyendo el nitrógeno que viene asociado con su extracción).
La petrolera prevé que con los campos que le fueron asignados en la Ronda 1 no va a impedir que las reservas totales de petróleo y gas se reduzcan 6 mil 530 millones de barriles de petróleo entre 2015 y 2020.
La pérdida de reservas denominadas 3P en ese periodo, equivaldría a 8.1 años de producción de petróleo crudo a los niveles actuales.