Las medidas de ajuste fiscal y política monetaria surtieron los efectos esperados, porque el peso se fortaleció frente al dólar al reducirse los incentivos para la especulación, afirmó el secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray.
“Sin duda [las medidas] reducen los incentivos a la especulación que tal vez fueron importantes en los últimos días”, destacó en entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva.
El funcionario dijo que tras el anuncio que hicieron de manera conjunta la Secretaría de Hacienda y el Banco de México, el tipo de cambio se situó en 18.11 pesos por dólar en su modalidad interbancaria frente a los 19.44 que alcanzó la semana pasada.
“Los anuncios han generado una considerable revaluación del peso mexicano, una apreciación por encima de lo que vemos en otras monedas; el peso está teniendo un mejor comportamiento, sin duda en las primeras horas al anuncio hubo una apreciación”, señaló Videgaray.
Explicó que el diseño de las medidas se hizo para anclar el valor de la moneda en los fundamentales de la economía porque “claramente estaba despegado de sus fundamentales”.
Resaltó que al actuar de manera coordinada las políticas fiscal y monetaria con el recorte al gasto, la subida de tasas y sin subastas de dólares predecibles, está generando un valor de la moneda hacia los fundamentales de la economía.
Comentó que recientemente se han dado eventos externos ajenos a las condiciones internas, como la caída muy pronunciada de los petroprecios y la situación de las tasas de interés en Estados Unidos, que han generado una afectación importante en el tipo de cambio.
Reconoció que lo anterior provocó una “muy justificada preocupación e incertidumbre” entre los mexicanos.
Por eso afirmó que las medidas para generar estabilidad funcionaron sin recurrir a un mayor endeudamiento, salida de capitales y menor crédito o mayor inflación.
Reacción tardía. En opinión de Guillermo Aboumrad, director de estrategias de mercado de Finamex, se requerían desde hace tiempo intervenciones discrecionales por parte de las autoridades del país, enfocadas a contrarrestar la especulación contra el peso mexicano.
Expuso que la moneda nacional es ampliamente utilizada por sus características de vasta liquidez para cubrir posiciones en otros activos, o aprovechada por su correlación con otras variables como el precio del petróleo o índices accionarios, mediante la programación de “robots” que exacerbaban los movimientos.
“La incertidumbre de cuándo intervendrá el Banco de México deberá ser suficiente para desalentar la programación de estos robots y otros especuladores, e incluso la autoridad puede usar menos dólares de las reservas internacionales”, opinó Aboumrad.
Agregó que el incremento en la tasa de interés referencial va a ser hacer más onerosa la especulación contra el peso mexicano, porque el costo de irse “corto” con el peso mexicano anteriormente era muy barato.
Para Luis Adrián Muñiz, subdirector de análisis económico de Vector, la facilidad de conversión que presume el peso mexicano le propicia que esté más expuesto a la volatilidad financiera global.
Expuso que la volatilidad financiera se agudiza en el contexto actual, ante la baja de los precios del petróleo, la incertidumbre sobre el ritmo alcista de las tasas de interés en Estados Unidos y la desaceleración de la economía de China.
En opinión de Mario Copca, estratega de inversión de MetAnálisis, la aceptación del peso mexicano a escala global facilita la entrada de inversiones al país.
