Durante los primeros 11 meses del 2013, la producción y venta de automóviles en China ya alcanzó las 20 millones de unidades, con lo que superó la producción anual de 19.3 millones durante 2012. El mercado interno del país asiático estará creciendo de 2 millones de unidades en 2000 a más de 20 millones en 2013. Éste se autoabastece con la producción tanto de empresas locales como de marcas destacadas a nivel mundial, como Volkswagen, GM, Toyota y Ford.
Las empresas chinas no han sido capaces de superar en el mercado local a los grandes líderes del sector —que destacan por su diseño y avance tecnológico— y que fabrican en China a costos bajos.
Para subsanar el posicionamiento de las marcas extranjeras, las empresas chinas han incrementado su potencial por la vía de adquisiciones, principalmente de empresas europeas, que como consecuencia de la crisis han tenido que buscar nuevos socios.
Así, destaca la adquisición de MG en 2005 por parte de SAIC, la adquisición de Volvo en 2010 por parte de Zhejiang Geely Holding Group, la inversión en 2002 de SAIC en GM Daewoo Automotive & Technologies y más recientemente está por concretarse la inversión en Peugeot por parte de Dongfeng’s.
Todas forman parte de una estrategia para lograr de manera acelerada un alto grado de transferencia tecnológica y diseño, que les permitirá competir con los grandes líderes mundiales del sector.
Las exportaciones de China, incluyendo las marcas occidentales, por primera vez alcanzaron la cifra de un millón de vehículos, que representa el 5% de la producción total. Simultáneamente se importaron 1.13 millones de automóviles en este periodo, de acuerdo al Ministerio de Industria e Información Tecnológica en China. En el caso automotriz, sus exportaciones son sumamente bajas, si las comparamos con la producción total.
En enero del presente año se incrementó el lanzamiento de nuevos productos por las empresas chinas. Por ejemplo, Guangzhou Automobile Group Co. Ltd presentó nuevos modelos en el Auto Show de Detroit, sin embargo, los autos chinos están lejos de llegar y conquistar el mercado americano.
La imagen de la China del siglo XXI, les ha permitido conquistar mercados en el sector de las manufacturas que los demás países no han sido capaces de tomar. Los chinos han logrado crecer con base en la reducción de márgenes para consolidar altos volúmenes que les permiten alcanzar economías de escala. En el sector automotriz, lo hace fundamentalmente con los autos de bajo costo.
En el caso de México, es factible que en un momento dado, los chinos, inunden el mercado con autos del orden de 5 mil dólares, puesto que los fabricantes actuales en nuestro país no han sido capaces de ofrecer este tipo de vehículos.
En nuestro país, 80% de la producción automotriz está destinada a la exportación hacia Estados Unidos, para la clase media norteamericana, con alta calidad y costos bajos. Sin embargo, es importante promover la fabricación de autos de bajo costo para mercados emergentes, desde México para el mundo, como lo intentan China e India.
Desde luego, la política industrial del gobierno para el sector nos ha llevado a ser el cuarto exportador de automóviles a nivel mundial. Para consolidar esta posición, es importante incentivar la producción de autos de bajo costo y alto volumen para el mercado interno y para la exportación en los mercados de América Latina, similares al nuestro. Éste es el gran reto para acabar de posicionarnos como líderes globales.
*El autor es profesor decano del área académica de Dirección de Operaciones del IPADE