Actualmente existen en el país más de 3 mil instituciones financieras no reguladas, lo cual representa un riesgo latente para los inversionistas, quienes al colocar su dinero en este tipo de empresas quedan desprotegidos en caso de alguna eventualidad, afirmó el director general de Bienestar Préstamos y Ahorros, Francisco Javier Perezanta Ordóñez.
Dijo que la empresa que él representa cuenta con 20 años de ser una institución consolidada y cuenta al momento con 33 sucursales distribuidas en cinco estados de la república mexicana.
Explicó que la empresa cuenta con un mercado dirigido, principalmente, al sector popular por la gran cantidad de productos de créditos de consumo que maneja, además de micro créditos y apoyo a pequeñas y medianas empresas (Pymes). Bienestar Préstamos y Ahorros es regulada por distintas instituciones financieras del país, entre las que destaca la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Instituciones Financieras (Condusef) y mensualmente es evaluada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Actualmente cuentan con mil 550 millones de pesos en activos y 850 millones de cartera vigente, esta última se espera que a finales del 2014, llegue a tener un saldo de mil 300 millones de pesos.
Bienestar, Préstamos y Ahorros, es una compañía clasificada dentro de segmento de Sociedades Financieras Populares conocidas como (Sofipos) las cuales además de ser reguladas y continuamente evaluadas por las autoridades correspondientes son, junto con los bancos, las únicas autorizadas a captar recursos de los ahorradores, al contrario de entidades no reguladas como son las cajas populares.
En el país existen 47 Sofipos y más de 3 mil cajas populares no reguladas, es en este punto, donde estriba el riesgo de que la gente pierda su patrimonio al acudir a empresas que les ofrecen atractivos rendimientos financieros que no son acordes con el mercado, señaló. Reconoció que este tipo de rendimientos también afecta a las mismas empresas captadoras de ahorros, lo que a largo plazo y repercutirá de manera negativa en la liquidez de sus fondos operativos, situación que eventualmente origina el cierre abrupto de tales compañías y la pérdida del patrimonio de los clientes afiliados.
Perezanta Ordóñez explicó que con base en los lineamientos anunciados recientemente por la CNBV, será el 31 de marzo de este año, cuando venza el plazo para que las instituciones que no están reconocidas oficialmente se integren al programa de regulación financiera que la dependencia implementa.
Concluyó que la empresa a su cargo tiene presencia en Querétaro, Guanajuato, Puebla, Hidalgo, DF y el Estado de México.