Los hermanos Iker y Guillermo Echeverría abren hoy su primera concesionaria en el Ciudad de México donde van a vender el deportivo VUHL 05.
El auto se fabrica en Querétaro, en una planta que lleva un año de operación, pero cuya inauguración oficial es hasta finales de 2016.
La primera versión del VUHL se presentó en 2013 en Inglaterra y durante estos casi tres años se estuvo trabajando en el proyecto de la planta para finalmente producir el vehículo en territorio mexicano.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Iker Echeverría, comentó que la planta tiene una capacidad instalada para producir 60 autos anuales, pero por el momento, se están fabricando 25 vehículos y la producción se va a ir incrementando en los siguientes años.
La compañía tiene vendidos esos 25 vehículos a clientes en Inglaterra, Alemania, Francia, Medio Oriente, Estados Unidos y México.
“El auto se puede comprar en la concesionaria en Campos Elíseos 247, pero también tenemos distribuidores en el Reino Unido y Medio Oriente”.
“Para el resto del mundo, los clientes pueden solicitar el automóvil a través de la página www.vuhl05.com”, explicó Echeverría.
El monto de inversión para la instalación de la planta es confidencial, pero los recursos se obtuvieron con capital de VUHL, el Conacyt y un inversionista privado.
“Hay un compromiso del gobierno de Querétaro de hacer una inversión a varios años junto con inversión propia de VUHL, pero las cifras son confidenciales por el momento”, dijo Iker.
El gobierno de Querétaro ofreció varios incentivos para que la planta de la armadora se estableciera en el estado como fueron capacitación de personal, vinculación con la Universidad Nacional Autónoma de Querétaro y el Centro de Materiales Compuestos que está por inaugurarse.
Actualmente, trabajan 25 personas en la planta para la fabricación del VUHL 05.
Las carrocerías del auto se fabrican en Canadá, el motor es de Ford con la tecnología turbocargada Ecoboost y 40% de sus componentes se importan de proveedores en el Reino Unido.
“La política de VUHL siempre fue tener un equipo compacto y muy talentoso de diseñadores e ingenieros que trabajaran en estrecha colaboración con alianzas estratégicas dentro y fuera de México como Multimatic, Magna Cosma, Michelin, Ford y Esiste, entre muchas otras compañías”, explicó Echeverría.
No obstante, uno de los principales obstáculos para fabricar el deportivo en el país fue la proveeduría de componentes, porque 50% de los componentes vienen del extranjero.
De familia. Desde pequeños, los hermanos Iker y Guillermo Echeverría vieron a su padre diseñar autos, construirlos, correrlos, componerlos y en muchas ocasiones ganar; porque su papá, Guillermo Echeverría fue piloto mexicano y corrió más de 30 años en diversas categorías como Fórmulas y Gran Turismo.
Iker y Guillermo estudiaron diseño industrial en la Ciudad de México y adquirieron experiencia en el desarrollo de proyectos automotrices dentro y fuera del país.
Cuanto Iker tenía 26 años y Guillermo 29, decidieron abrir una compañía de asesoría de ingeniería y diseño llamada “ETXE” de la cual salieron los recursos para capitalizar parte del proyecto VUHL 05.
Desarrollo de más de tres años. El proyecto de diseño del VUHL les tomó 38 meses desde que era una hoja en blanco hasta el lanzamiento en el Reino Unido en 2013.
“Este proyecto inició por la pasión por los autos de competencia heredada de familia, no por la inquietud de resolver un sistema de transporte. Sin embargo, siempre se tuvo en mente la idea de generar ideas o tecnologías, las cuales están en proceso de patente, que fueran permeadas a otros tipos de transporte para así beneficiar a otros sectores”.
“El VUHL 05 tiene una genética de auto de competencia; sin embargo, el automóvil fue diseñado alrededor de la norma europea de certificación vehicular y puede ser emplacado”, explicó Echeverría.
El precio del VUHL 05 comienza en los 114 mil dólares y es configurable en sus diferentes versiones arriba de 200 mil dólares.