Huawei, el conglomerado de las telecomunicaciones asiático, lanzará en México el teléfono inteligente Ascend P6 a partir de septiembre próximo, con el objetivo de ganar participación de mercado en el segmento de usuarios de altos ingresos, un mercado que hasta ahora ha sido dominado por la estadounidense Apple con un ecosistema conformado por las marcas iPhone, iMac y iPad.
La estrategia de la empresa china toca varios frentes en los que, hasta ahora, ni Apple ni Samsung han mostrado interés, de acuerdo con directivos de la compañía.
Al mismo tiempo del lanzamiento de sus sistemas P6 y Mate, Huawei lleva ya varios años como proveedor de tecnología Long Term Evolution (LTE), o redes de cuarta generación (4G), alrededor del mundo. La empresa asiática divide sus negocios en tres divisiones estratégicas: consumo, empresas (y gobierno), así como operadores.
El lanzamiento del dispositivo P6 será una de las pinzas que la compañía tendrá que cerrar para ganar posicionamiento en el mercado de la demanda de datos a través de dispositivos móviles. La otra pinza para Huawei será su papel de proveedor de LTE.
"Trabajamos con más de 100 operadores alrededor del mundo, y también tenemos 25% de participación de mercado en infraestructura de redes móviles", dice Lu Xingang, vicepresidente de la línea de productos LTE.
En el último año la empresa asiática obtuvo sus mayores ingresos en la división de operadores con 75%; consumo le representó 22% y el resto lo obtuvo por sus ingresos como proveedor de empresas y gobiernos. Pero la idea es genera un equilibrio entre las tres divisiones, explica Roland Sladek, vicepresidente de asuntos de medios internacionales.
Huawei es una empresa que se fundó en 1987 en la ciudad Shenzhen, China. Al mismo tiempo que la economía de este gigante asiático se aceleraba, la empresa inició también un camino de crecimiento sostenido dentro y fuera de China.
En el año de 2008 la empresa registró una facturación de 18 mil millones de dólares anuales, pero la cifra casi se duplicó al final de 2012 al llegar a 35.4 miles de millones de dólares. Los beneficios de la empresa reportaron su pico más alto en 2010 cuando llegó a 24.7 miles de millones de dólares.
Huawei tiene sus oficinas corporativas en la ciudad de Shenzhen, un antiguo pueblo de pescadores que después de la época de la reforma y la apertura, que sucedió en la década de 1970, se convirtió en uno de los polos de desarrollo más relevantes para China. También en esta ciudad se han ubicado corporativos de gran peso como Foxcom.
Al día de hoy las oficinas en Shenzhen albergan a más de 70 mil trabajadores entre funcionarios, ejecutivos, ingenieros, entre otros, gran parte de ellos jóvenes no mayores de 30 años. Salvador Wang, por ejemplo, es gerente de relaciones públicas de Huawei para México con apenas 23 años pero con el dominio de varios lenguajes (español, inglés, japonés y chino).
En la ciudad de Shangai, otro de los polos de desarrollo de China, Huawei puso en marcha su Centro de Investigación y Desarrollo, un complejo con más de 10 mil ingenieros dedicados a diversas tareas relacionadas con la industria de las telecomunicaciones, así como de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
"En septiembre vamos a lanzar este teléfono ((P6) en México, tenemos buenas expectativas de mercados emergentes, especialmente de México", dice Jerry Huang, director del departamento de mercadotecnia de la firma.
"Samsung tiene buena presencia en México, al igual que Apple y Huawei tiene una presencia baja en México, pero podemos cambiar eso, podemos mejorar nuestra presentación trayendo inversiones en el mercado local y mejorando nuestra participación", explica el directivo.
En los próximos 5 años se vivirá la Golden Age para los servicios de banda ancha a través de dispositivos móviles, asegura Lu Xingang, vicepresidente de la línea de productos LTE.
Los ingresos en el mercado móvil se incrementarán a un ritmo de 10% cada año, porque podemos ver más y aplicaciones. Hasta ahora sólo un 2% de la población mundial tiene acceso a tecnología LTE, de acuerdo con el directivo.
