Cartera

La mente del emprendedor

La mente del emprendedor
24/03/2015 |00:06
Redacción Querétaro
Pendiente este autorVer perfil

Mientras que la primera recomendación para los emprendedores es buscar un mercado para su producto, Phil Libin recomienda lo contrario: que los emprendedores hagan un producto o servicio que amen.

Después habrá otros que adoren tu producto y así, ellos vendrán hacia ti. Luego de crear dos empresas con la mentalidad tradicional, la de tratar de encajar en las necesidades de los consumidores, Phil se dio a la tarea de empezar a la inversa y dio luz a Evernote, una aplicación que busca organizar la información personal a través de archivos de notas.

Si bien acepta que este pensamiento no aplica para todas las industrias, esta forma de pensar le ha dado forma a una compañía que hoy tiene más de 400 empleados que despacha desde el mítico Sillicon Valley —junto a gigantes como Apple y Hewlett Packard— y de la que él es el Chief Executive Officer (director ejecutivo).

La empresa ha tenido momentos críticos en los que por falta de financiamiento ha estado a punto de cerrar, sin embargo, hoy tiene 100 millones de usuarios a nivel mundial y está valuada en mil millones de dólares. Uno de sus objetivos de negocio es aumentar los usuarios en América Latina, explica en entrevista con EL UNIVERSAL.

Tú dices que los emprendedores deben de crear algo que les guste a ellos y no pensar en el mercado. ¿No es un poco riesgoso para iniciarse en los negocios?

Sí, es muy riesgoso. Si vas a hacer una nueva empresa, es en sí ya muy peligroso y la mejor oportunidad de tener éxito es hacer algo muy bueno y creo que la forma de saber si algo lo es, es si te gusta a ti.

Para empresas más grandes sí hace más sentido pensar en qué es lo que quiere el mercado, pero para empresas nuevas es menos riesgoso hacer algo que te guste.

¿Entonces haces algo para ti y luego sales a buscar al mercado?

—Creo que por la forma en que funciona el mundo, depende de la industria. Si estás en tecnología y haces algo bueno para ti, si haces algo que ames, probablemente a miles de millones de personas en el planeta les guste.

Y si haces algo raro, quizá sólo le guste a 100 millones y ellos pueden acceder a tu producto o tu servicio por las redes sociales. Ellos vienen a ti, no tienes que ir por ellos.

Eso sólo aplica a ciertas industrias. Si estás en un negocio de petróleo, eso quizá no aplique; pero si haces apps, hacer algo hermoso funciona.

¿Cómo deben de probar su producto los emprendedores?

—La ventaja de hacer algo para ti es que tienes algo bueno ya, entonces cuando hablas con los clientes es muy importante escucharlos. Es importante poner atención a la retroalimentación, especialmente a la parte negativa. Los clientes son mejores diciéndote qué está mal. Los cumplidos y lo positivo pueden confundirte.

Gracias a la forma en la que funciona el mundo, es mucho más sencillo tener retroalimentación.

Mi consejo para los emprendedores es que escuchen las críticas, y no sean emocionales al respecto. No te quedes enganchado con los cumplidos, escucha la retroalimentación.

Un aprendizaje constante

Libin asegura que a lo largo de sus varios emprendimientos no se ha concentrado en la actividad misma de emprender, sino que se puso como propósito el crear en esta tercera ocasión algo que realmente amara. Las empresas que había fundado eran pequeñas, a diferencia de Evernote, lo que le trae nuevas experiencias que le hacen aprender de forma constante.

“Cometo errores a diario porque estoy aprendiendo a manejar una empresa mediana. Es un gran reto. Reviso qué estaba pensando cuando me equivoqué. Me doy cuenta que cuando eres emprendedor, no puedes tomar decisiones basadas en el miedo y sólo intentando sacar el fracaso”, asegura.

No sólo el acto de emprender, sino el de liderar una empresa lleva una relación implícita con las emociones.

Phil asegura que esta relación es sumamente complicada.

“Yo soy muy emocional, y es duro lidiar con ello. Por ejemplo, con las críticas. Es duro lidiar con ellas, pero tienes que entender que aceptarlas hará mejor tu producto. Debes de agradecerlas y considerarlas tus amigas, porque van a ayudarte”.

¿Cómo debe de lidiar con las emociones un emprendedor?

—Es muy importante establecer metas internas para que tú como emprendedor puedas analizar si fuiste exitoso o no, a partir de tus parámetros.

Es emocionalmente difícil cuando piensas que hiciste algo bien y fallaste, pero la forma de lidiar mentalmente con ello es que tu meta sea hacer algo que amas y que sea de mucha calidad. Si no lo hiciste, entonces es fracaso; si trabajaste muy duro y realizaste algo muy bueno, debes sentirte muy bien, aunque no haya sido exitoso en el mercado. Debes de sentirte como si hubieras tenido éxito, debes aprender y comenzar con lo siguiente.

¿Cómo lidiar con el fracaso?

—Todo empieza con la pregunta, ¿quién debe ser un emprendedor? Tú probablemente no debas de seguir este camino si no puedes permitirte al menos el fracaso financiero, por ejemplo. Debe de haber una selección. Lleva autoconocimiento, si el fracaso es muy importante para ti, no deberías de hacerlo, nadie está forzado a crear una empresa. Nunca es tarde para irte, siempre puedes hacer otra cosa.

Quien falla tiene que preguntarse si lo hizo por alguna acción propia, porque no trabajó mucho, por ejemplo; entonces merece fracasar. O no, o el emprendedor hizo las cosas bien y trabajó mucho, pero no tuvo eco en el mercado.

La segunda no es fracaso, es éxito, porque cuando sea su último día en la vida podrá voltear atrás y sentirse bien por ello.

En México, muchos emprendedores lo son porque no tienen otra oportunidad de sobrevivir. ¿Qué les dirías?

—Es un tipo de emprendedor y de persona diferente a los que existen en Sillicon Valley y no tengo tanta experiencia con ellos.

Creo que la gente siempre tiene otra opción, es difícil para mí pensar que la única opción es entrar a una incubadora; si entras, es porque quieres cambiar el mundo.

Si la persona nada más quiere sacar dinero suficiente para sostener a su familia, a eso se llama autoempleo. Necesita mucha valentía, pero no es lo que se hace como emprendedor. Es una mentalidad muy diferente, si vas a tener autoempleo para mantenerte a ti y a tu familia necesitas una mentalidad, motivaciones y un set de habilidades muy diferentes a quien quiere transformar y hacer algo muy grande.

¿Cómo es el día a día para ti?

—Alguien me preguntó con respecto a emprender, ¿tú te diviertes día a día? Honestamente, no me divierto diariamente, pero cuando veo lo que logramos en los últimos 30 días, es increíble, y sí, lo hago.

Cuando regrese a la oficina, y es el día a día, es difícil, pero nunca ha habido malos meses. Ha habido malos días, e incluso malas semanas, pero no malos meses. Definitivamente no ha habido un mal año.

Una paradoja

En los negocios, la relación entre los factores importa a la hora de tratar de emular el éxito. Phil utiliza la idea de la ‘paradoja del éxito’ para explicar uno de los errores cognitivos más comunes: el creer que porque ciertas circunstancias están juntas, una causó a la otra. Esto tiene aplicación cuando los emprendedores tratan de seguir los pasos de grandes figuras.

¿Cómo funciona la paradoja del éxito?

—No porque algo pase junto quiere decir que uno causó el otro. Muy seguido, cuando dos cosas pasan juntas, una suele ser buena y tú la quieres alcanzar, y como ves también que la otra cosa pasó al mismo tiempo, también la quieres alcanzar.

Entonces la paradoja del éxito es que una no causó a la otra, quizá una de ellas está haciendo incluso que la mejor sea menos vistosa.

El ejemplo clásico es: ves a Steve Jobs, y muchos dicen que era una persona con la que era muy duro trabajar, pero fue muy exitoso.

Entonces, ¿es exitoso porque era un tirano? No, esa es la paradoja. Hubiera sido más exitoso si hubiera sido más fácil trabajar con él.

Es un error cognitivo muy común. La gente ve a empresas y a personas que quieren imitar y quieren imitar la parte negativa también.

¿Podrías poner otro ejemplo?

—”La gente es más exitosa si abandona la escuela”. No, yo me arrepiento de haber dejado la escuela. No me lastimó tanto, pero tampoco me ayudó. Deberían tratar de evitar las cosas negativas para ser exitosos más fácilmente.

¿Crees que los emprendedores deben de ir al escuela?

—No, creo que deben decidir qué es lo que quieren hacer, es agradable terminar la escuela, por ejemplo, si es que decides ir.

Te lo pongo así: si yo iba a dejar la escuela, ¿cuándo debí de hacerlo? Antes de cuando lo hice, porque la dejé faltándome una materia. Debería de haber terminado, la escuela enseña cosas. Creo que cuando tienen la oportunidad, deberían de ir al escuela, es algo que no deberían dejar, pero no rechazaría a alguien que no la hubiera terminado.

En Evernote tenemos dos personas que no han terminado la preparatoria, pero, otra vez, quizá hubieran sido más exitosos si hubieran terminado.

¿Qué recomendarías a los emprendedores con respecto a sus competidores?

—Es muy importante que ellos piensen nada más en ejecutar su producto. Cuando un inversionista le pregunta a un emprendedor cuál es su competencia, ¿qué respuesta va a recibir?

La respuesta ‘no sé’ no es la correcta porque el emprendedor tiene que conocer a la industria.

Definitivamente el inversionista no espera escuchar que no hay competencia, porque si responde eso es que en la realidad el emprendedor no sabe, o no hay mercado para el producto.

La respuesta ideal sería “sí hay competencia, están estas cinco compañías”. Lo que me gustaría escuchar como inversionista es que el emprendedor se emocione acerca de la industria en la que está, conozca sus competidores, pero que no responda a ellos, sino que trabaje para él mismo.

Probablemente cuando digo que debes de ignorar a tus competidores es que debes de conocerlos, pero luego ignorarlos.