Luego de 25 años dedicados a bordar y a confeccionar prendas de vestir, principalmente para el gobierno, Global Color ha logrado duplicar su plantilla laboral, y ahora busca una mayor participación en el segmento industrial.
En estas dos décadas nos hemos caracterizado por la confección de uniformes, playeras, gorras, pantalones de vestir, pantalones de mezclilla, batas, filipinas, mandiles, así como demás prendas de uso empresarial, industrial o gubernamental, explicó la representante administrativa de la empresa, Jazmín Puga.
Las 45 personas que conforman la plantilla laboral de Global Color, la catalogan como una pequeña compañía, con en Querétaro. La empresa cuenta con cuatro talleres —dos de confección y dos de bordado—; dos se sitúan en el municipio de Colón, uno en la capital, y otro más en San Bartolo, Guanajuato.
Aun cuando es una pequeña empresa, el negocio está organizado en diferentes áreas, que son: atención al público, almacén, ventas, área de bordado y área de estampado. Las telas que utilizan en sus procesos de producción se traen de la Ciudad de México.
Desde la fundación de la empresa —a la fecha—, la plantilla de trabajadores se ha duplicado: “empezó como un taller pequeño con alrededor de 20 personas, (el cual) antes estaba en Bernal (municipio de Ezequiel Montes); después cerró porque no había solvencia económica para continuar, a raíz de eso se hizo una oficina y otra vez se volvió a levantar”, recordó Puga.
A pesar de los vaivenes económicos, Global Color ha logrado consolidar su clientela, expuso.
La compañía, agregó, provee a la Comisión Estatal de Caminos (CEC), a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), a la Unidad de Servicios Escolares del Estado de Querétaro (Usebeq), la Comisión Estatal de Aguas (CEA), así como a las plantas de Brose Querétaro, Brose Reynosa, Brose Puebla y otras industrias en la entidad.
Si bien su mercado principal es Querétaro, también produce prendas para clientes en Tamaulipas y Guanajuato, dijo.
Destacó que semanalmente la empresa confecciona mil prendas y realiza alrededor de 8 mil bordados, que se distribuyen entre sus diversos clientes.
Sin embargo, la pequeña empresa todavía carece de un plan de desarrollo formal, aunque vislumbra extender su mercado.
“Lo que estamos tratando de abarcar es a las empresas del Parque Industrial Querétaro, el de El Marqués, pero de momento nuestros clientes más fuertes son las instancias públicas”, explicó.
