La inflación en la primera quincena de noviembre repuntó por arriba de lo esperado, como resultado del incremento en bienes agrícolas energéticos como las tarifas eléctricas, gas doméstico LP y la gasolina de bajo octanaje, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El índice nacional de precios al consumidor registró una variación de 0.92% en la primera mitad del penúltimo mes del año, tasa superior al 0.73% que anticipaba el consenso de especialistas. El dato se ubicó como el más alto desde la primera mitad de enero de este año, cuando se dio el llamado gasolinazo, y se trata de la tasa más elevada para una primera quincena de noviembre desde 2011.
Así, la inflación general a tasa anual llegó a 6.59%, un repunte pronunciado desde 6.44% que registró en la segunda quincena de octubre.
Entre los bienes y servicios con mayor incremento de precios y que tuvieron mayor incidencia en la inflación destacó la electricidad, con un alza de 24.69% en la primera quincena de noviembre.
Otros genéricos que pesaron fueron el gas doméstico LP, el transporte aéreo, gasolina de bajo octanaje y jitomate.
“Las presiones alcistas sobre los precios de bienes agrícolas y de la energía sugieren que el descenso de la inflación anual pudiera ser más lento de lo que hemos anticipado”, comentó Eduardo González, analista económico de CitiBanamex.