Durante el primer semestre del año, la inversión directa de mexicanos en el exterior ascendió a 3 mil 959 millones de dólares, cifra 17.9% inferior a la registrada en el mismo periodo del año anterior, el nivel más bajo para un primer semestre cuando menos desde 2008, de acuerdo con los datos más recientes de la balanza de pagos del país dados a conocer por Banco de México.
Todo parece indicar que las empresas que operan en México han reducido sus proyectos en los mercados foráneos. En contrapunto, la Inversión Extranjera Directa (IED) sumó 9 mil 733 millones de dólares, con lo que el saldo neto de inversión directa resultó favorable para el país por 5 mil 744 millones de dólares.
El flujo de inversión foránea a México en los primeros seis meses del año resultó muy inferior a los 23 mil 847 millones de dólares alcanzados en el mismo periodo del año anterior, debido a dos transacciones atípicas; por un lado, la venta de acciones de la empresa mexicana Grupo Modelo a inversionistas extranjeros por 13 mil 249 millones de dólares.
Por otro, durante el segundo trimestre de este año se llevó a cabo la compra de acciones por parte de inversionistas mexicanos a la empresa América Móvil por 4 mil 495 millones de dólares, cifra que significó para efectos estadísticos una transferencia de inversión extranjera a mexicanos.
Sin embargo, de no haberse presentado las operaciones mencionadas, una que transfiere inversión de mexicanos a extranjeros en 2013 y otra por la adquisición por parte de mexicanos de acciones de extranjeros en 2014, la cifra de Inversión Extranjera Directa durante el primer semestre de este año hubiera sido 34% superior a la del mismo periodo del año pasado.
Perspectiva positiva
En opinión de especialistas, la perspectiva tanto para la inversión de portafolios como la inversión directa es positiva, debido a la aprobación de las leyes secundarias de las reformas.
En primer lugar, se espera un incremento gradual en el optimismo conforme se conozcan mejores cifras económicas, lo cual podría favorecer a México con respecto a otras economías emergentes en el corto plazo. Por otra parte, la expectativa de inversión, principalmente en el sector energético, será un factor que impacte positivamente a la IED a mediano y largo plazos, comentó Isaac Velasco, del banco Ve Por Más.
El favorable flujo de capitales hacia el país se vio reflejado en el dinamismo de la inversión extranjera de cartera (o financiera), que durante el primer semestre del año ascendió a 33 mil 156 millones de dólares, monto superior a los 14 mil 885 millones de dólares registrados en el mismo periodo del año anterior.
Lo anterior trajo como consecuencia que el saldo de la cuenta financiera en la balanza de pagos al cierre de junio pasado se ubicará en 32 mil 182 millones de dólares, monto 44% mayo al alcanzado al cierre del primer semestre de 2013. Con este resultado se cubrió ampliamente los 11 mil 371 millones del déficit en cuenta corriente registrados en la primera mitad del año.
En opinión de Joan Domene, analista de Invex, el déficit de la cuenta corriente se mantuvo en niveles financiables gracias a que los flujos de capitales a México dirigidos a la manufactura registraron un monto importante, así como los derivados de los servicios financieros. Esto se debe a la estabilidad macroeconómica y de una perspectiva favorable frente a las reformas estructurales. En este sentido, el analista espera que los niveles de déficit se mantengan prácticamente sin cambio durante este año debido a una mejora de la balanza comercial.