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Los resultados de las reformas estructurales toman tiempo, pero en el caso de la financiera, hay evidencias de que sus beneficios ya son una realidad para los usuarios de la banca en México, afirma Ernesto Torres Cantú, director general de Grupo Financiero Banamex.
Los objetivos del nuevo marco legal se han cumplido, dice en entrevista con EL UNIVERSAL, pues se ha otorgado más financiamiento y han bajado las tasas de interés, y eso aplica para los segmentos de créditos personales, para pequeñas y medianas empresas (Pymes) y para hipotecas.
“Ya está caminando (la reforma)”, destaca. “La penetración del crédito al sector privado en el sistema en México está ahorita en 31%, y hace un año estaba en 25%. El objetivo que tenemos es llegar a 40% para 2018”.
—Para este año bajamos nuestra proyección de crecimiento a 3%. Para el año que entra, ya sin las coberturas, estimábamos un impacto en el PIB de 0.6%.
El recorte es de 0.7%, entonces ya cubre el impacto que preveíamos para 2016 desde el punto de vista de finanzas públicas.
Obviamente, también bajamos el crecimiento para el año que entra, lo traemos en 3.5% .
El recorte preventivo del presupuesto nos parece una medida buenísima.
Como gobierno es muy fácil decir que estás comprometido con la estabilidad macroeconómica, pero es bien difícil actuar en consecuencia y el gobierno mexicano lo hizo; a mí me parece muy valiente, sobre todo en un año electoral.
—Con todo y eso vamos a crecer 3%, la verdad es que ese crecimiento del 3% pudiera ser mejor, sin embargo en el entorno internacional, ¿cuántos países han pasado de crecer el 1%, luego el 2% y el 3%? Hay muy pocos. México se ve muy bien.
—Tiene un impacto psicológico importante, si no hubiéramos sabido las expectativas y viéramos solamente el resultado en sí mismo, que es éste de 1%, a 2%, a 3%, te estaría diciendo vamos bien, sobre todo cuando lo comparas con el resto del mundo. Lo que pasa es que las expectativas eran mayores y sí hay un cierto desencanto.
—Creo que tiene sustento, el tema era el tiempo, el momento mexicano se va a dar. Las reformas que hizo México nada más son comparables a las que hicimos en 94, y a raíz de esas reformas es que ahora somos una potencia exportadora.
Por ejemplo, dominamos por mucho el mercado automotriz; somos jugadores muy importantes en la cuestión aeroespacial, todo eso es consecuencia de las reformas que se hicieron en aquel entonces, se tardan un poco más, pero el mexican moment va a suceder.
Nos fuimos del lado súper optimista a una percepción más negativa, y ahora estamos más realistas en términos de las expectativas hacia adelante.
—Sin duda, el año pasado anunciamos que teníamos disponibles 130 mil millones de pesos para las inversiones en energía y en infraestructura, y estamos evaluando muchísimos proyectos, tanto nacionales como extranjeros para invertir en México.
—No sé el monto, pero seguramente sí van a participar más de lo que tenían previsto.
—No sé si de 5%, pero superior a lo que estamos teniendo en la actualidad, seguramente sí.
—En términos técnicos no, está altísimo el dólar. Antes de iniciar un ciclo de tasas a la alza hay una volatilidad similar a ésta, por lo que calmándose ese factor, el tipo de cambio debe regresar a niveles más normales.
—No hay salida de capitales, porque es compra-venta de bonos, el dinero no sale de México. En el momento que nuestro país puso el bono en el extranjero y lo compraron los extranjeros, ese dinero ya entró y ya lo tiene el gobierno. Lo que puede pasar es que cambian perspectivas y un tenedor de bonos se lo vende a otro, pero no hay salida de dinero del país.
En ese sentido se sustituye un inversionista por otro, y el que compra puede ser mexicano o extranjero.
A mí en todo caso me parece que es una enorme señal de confianza sobre lo que esperan de México en el futuro, porque ese número es cierto en el caso de tenencia de corto plazo, pero también de tenencia de largo plazo; entonces, la perspectiva tiene que ser buena para quien tenga estas inversiones.
—Creo que el tema que como país tenemos todavía que resolver, y esa es una preocupación nuestra y de cualquier inversionista, sea mexicano o extranjero, es el del Estado de derecho y su aplicación. Los últimos pasos que se han dado respecto del fiscal anticorrupción van encaminados a regresar esa confianza, y son los pasos correctos. Es muy importante que lo que veamos hacia el futuro sea más y mayor transparencia en las decisiones del gobierno. Eso nos sube a otro nivel de posibilidad de desarrollo no nada más económico, sino también social, por eso es tan importante que sigamos avanzando en esa línea.
—La mayor parte de las pérdidas de 2014 están relacionadas con Oceanografía. Sin eso, hubiéramos tenido una utilidad ligeramente mayor a la que tuvimos en 2013. Pero este año esperamos ir hacia adelante. Sin duda, será un mejor año.
—A Oceanografía ya le dimos la vuelta, eso ya pasó, ya perdimos lo que perdimos, ya hicimos la revisión de los procesos que teníamos que hacer, y en ese contexto ya le dimos la vuelta. Ahora lo importante hacia adelante es concentrarnos en servir a nuestros clientes y en asegurarnos que eso mejore todos los días, esa es una verdadera obsesión por garantizar que el servicio que les damos a nuestros clientes sea el mejor servicio de la banca en México, ese es un objetivo clave para Banamex.
—La innovación está en muchos puntos. Hace como 6 o 7 años, fuimos el primer banco en México que instaló un cajero donde puedes depositar dinero en efectivo.
También fuimos el primer banco en lanzar una banca móvil masiva importante. Todas estas son innovaciones en el sentido de que estás donde el cliente quieres que tú estés. La innovación la vemos en sucursales, ya tenemos varias cada vez más digitales, eso me parece fundamental; la masificación de la billetera digital, creo que también por ahí va a venir algo importante.
En Estados Unidos Citi ya sacó el Apple Pay con el nuevo iPhone 6; ese tipo de innovación es verdaderamente relevante, porque hace la vida más fácil para los clientes. Por ese lado van a venir las innovaciones del banco.
—Sin duda, Pymes (pequeñas y medianas empresas).
—Ahorita estamos creciendo cerca de un 30%, y eso va a continuar creciendo a niveles altos.
—Sí claro, no en todo el portafolio, pero sí en una parte. Te facilita la entrada a segmentos que a lo mejor no conocemos mucho, y por eso entras con la garantía de Nafinsa.
Pero ya que lo terminas de conocer, entonces dejas la garantía y la vuelves a utilizar para otros segmentos a los cuales quieres entrar.
—En el caso de Banamex no es así. En hipoteca estamos bajísimos y muy estables, en consumo subió a mediados de año y luego empezamos a bajar, y lo veo que continúa bajando. Pyme está abajo, muy estable, así es más o menos como lo vemos. En la banca en general sí se ve un crecimiento en hipotecas.
—Depende de que usemos la tecnología que tenemos disponible, y seguramente sabes del proyecto piloto que tenemos con el Instituto Nacional Electoral (INE) para la cuestión de la huella digital. Tenemos 300 sucursales ahorita donde quien llega a abrir una cuenta, pone su huella digital, y la base de datos no la tiene Banamex, está en el INE. Lo que hacemos es ir a checar que quien quiere abrir una cuenta sea la persona que dice ser, para que no haya suplantación de identidad.
—Depende de las aprobaciones que están pendientes del IFAI, y que sean las aprobaciones finales; una vez teniendo éstas, sería bastante rápido.
—Por supuesto, se ha otorgado más crédito y han bajado las tasas, y eso es cierto en créditos personales, en Pymes, en hipotecas. Ya está caminando.
—Sí que termine de madurar lo que ya arrancó, si ahorita llevamos un incremento del crédito como sistema de equis, que ese sea un poco mayor, que continúe la disminución de las tasas que se ha dado hasta ahorita. Eso por supuesto no es que quede pendiente, es que falta más tiempo para que suceda.
La penetración del crédito al sector privado en el sistema en México está ahorita en 31%, y hace un año estaba en 25%. El objetivo que tenemos es llegar a 40% para 2018. En una plática con empresarios me preguntaban que Chile está en 60%, y ¿cómo llegó ahí? Pues llegó a 60% porque pasó por 25, 26, etc. y vas avanzando uno por uno. Nosotros vamos en esa línea, y es muy importante que vayamos creciendo a un ritmo que sea sostenible en el futuro, no con crecimientos que tuvimos en 1994, por ejemplo.
—Estoy de acuerdo, pero entonces es decir, ¿el crecimiento de este año va a ser superior al del año pasado en el PIB? Sí, es un hecho. Como consecuencia de eso, ¿el crecimiento del crédito en este año debe ser mayor al del año pasado? Sí, y va a ir mejorando conforme lo haga también el crecimiento del PIB.
—Sí nos da para llegar a 40% en 2018. Es un crecimiento sostenible, no son crecimientos de 6 o 10 veces el PIB, y eso nos da manera de sostenerlo. Puedes tener algunos portafolios que crecen más porque tenían menos penetración de crédito y porque estás partiendo de una base más chica, por ejemplo en el caso de Pymes. Pero en el sistema no puedes crecer a ese tipo de tasas sin tener un problema.
—No, focos rojos no, pero como todo —y más en el crédito y en la banca— tienes que estar al pendiente siempre, quiere decir que cualquier cuestión que ves que no te empieza a gustar, tienes que ajustarla, pero no es a nivel sistémico.
—Por supuesto que no.
—Por supuesto. Hay muy pocos mercados en el mundo donde esperamos el crecimiento que se anticipa para México, y donde tenemos la participación de mercado que tenemos.
En México somos el principal grupo financiero, tenemos la mayor captación del sistema con 1.6 billones, esa es una enorme responsabilidad, además de la confianza que los clientes nos tienen. Tenemos el mayor capital invertido en México, no nada más de cualquier banco, sino de cualquier empresa, de cualquier sector.
Nadie tiene más capital invertido que Banamex, con 172 mil millones de pesos, esa es una muestra de confianza en nuestro país.