Reducir la desigualdad de ingresos entre los habitantes y prolongar el reciente dinamismo productivo son los principales retos económicos del próximo gobernador del Estado de México.
Se trata de la segunda entidad con mayor peso económico en el país, sólo después de la Ciudad de México, y registró un crecimiento de 3.5% el año pasado, el mayor en cuatro años, de acuerdo con cifras del Inegi.
Además, la economía mexiquense superó la expansión de 2.3% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, por primera vez en seis años. Para el economista sénior de Banorte, Alejandro Cervantes, hay dos principales retos
El primero será mantener el dinamismo productivo, luego de que la economía mexiquense fue impulsada recientemente por el mayor gasto en infraestructura. La industria de la construcción se aceleró 16.6% el año pasado, de acuerdo con el Inegi.
“Independientemente de qué partido provenga el próximo gobernador, su principal reto será mantener el dinamismo productivo con respecto al promedio nacional”, comentó.
El Estado de México es la séptima entidad con el ingreso per cápita más bajo del país y el cual ha disminuido desde que inició la administración de Eruviel Ávila Villegas.
Según el Coneval, 8 millones 270 mil mexiquenses eran pobres en 2014, se trata de la entidad con mayor número de habitantes en esta condición en el país. La proporción de mexiquenses que vivían en pobreza pasó de 42.9% en 2010 a 49.6% en 2014, un aumento de un millón 558 mil personas.
Cervantes opinó que otro de los principales retos del próximo gobernador será disminuir la desigualdad de ingresos entre los mexiquenses. Consideró que se requiere un mayor dinamismo del mercado laboral y la continuidad de los programas sociales.
CitiBanamex anticipa que la economía mexiquense va a crecer 2.2% este año, una desaceleración con relación a la expansión de 3.5% en 2016.
De confirmarse lo previsto por la institución, el PIB del Estado de México va a promediar un crecimiento de 2.3% anual durante la administración de Eruviel Ávila. Significa un desempeño menor que el ritmo promedio de 3.2% registrado por su predecesor, Enrique Peña Nieto.
A su vez, las actividades relacionadas con los servicios aumentaron 3%, mientras en el resto del país se expandieron 3.4%.