La celebración a los muertos es una de las tradiciones más arraigadas y concurridas por las familias mexicanas, se posiciona como una de las que económicamente más reditúa para el sector comercial; según estimaciones de las cámaras de comercio en Querétaro, esta época representa 10% de las ventas totales del año.
A través de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) se dio informe de que a partir de mediados de octubre y hasta pasando el Día de Reyes en el mes enero (un lapso de tres meses) se realiza 50% de las ventas totales del todo el año. Eso implica que cada celebración significa una venta promedio de 10%: Halloween y Día de Muertos, “El Buen Fin”, Navidad, Año Nuevo y Día de Reyes.
Los adornos y productos alusivos a la celebración de noviembre se pueden encontrar en tiendas departamentales desde que inició el mes de octubre, al ir “un paso adelante” ya se pueden ver, incluso, adornos relacionados con la Navidad.
En estas semanas se montan puestos tradicionales (de temporada) siendo uno de los más antiguos el del mercado de La Cruz, en donde participan nueve puestos en la explanada del mercado.
Familias que se dedican a la fabricación de artesanías como las tradicionales calaveritas de azúcar, chocolate y de “gomita”, catrinas, “calacas”, mini altares y demás adornos para el altar de muertos. Cada año durante dos semanas (hasta el 2 de noviembre) llegan a este punto para la venta de la temporada; a pesar del paso de los años “sigue saliendo la venta” dicen.
Desde el mes de septiembre comienzan la fabricación de estos productos y los van guardando en cajas, para que de esa manera no se maltraten, todo lo que sobra al final del Día de Muertos, lo regalan —dicen— porque no puede ser guardado hasta el año siguiente.
Terminan esta venta y esperan la llegada de la época de posadas navideñas para vender artesanías de temporada, después llega el Día de Reyes, la Candelaria, Día del Amor y la Amistad, la Primavera, el Día de la Independencia, y así hasta lle gar nuevamente el Día de Muertos.
“Las flores suben sólo si el proveedor lo aumenta, hasta ahora no tenemos porqué subir costos”, explica Gaby, dueña de florería.