El inminente recorte al gasto público tendrá impacto negativo de hasta medio porcentual al crecimiento económico este año, estimaron analistas.
Este día, el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dará a conocer el ajuste al presupuesto, tras reconocer que los ingresos presupuestarios serán menores a lo esperado.
El menor precio del petróleo tendrá un impacto sobre las finanzas pública, ya que un tercio de los recursos que obtiene la Federación son por la renta de este hidrocarburo.
Se estima que entre 90 mil y 100 mil millones de pesos podrían ser los recursos que sacrifique el gobierno federal, y que gran parte de ellos los absorberán Pemex, CFE y proyectos de inversión de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
El director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, José Luis de la Cruz, estimó que un recorte de alrededor de 100 mil millones de pesos tendrá un impacto de hasta medio punto porcentual del PIB.
“Hay que esperar a ver por dónde estará más recargado el recorte, pero es un hecho que el ajuste tendrá un efecto de medio punto porcentual porque en los últimos dos años la estrategia del gobierno fue generar crecimiento económico vía gasto público”, explicó el analista.
Aseguró que este anuncio del recorte al gasto público es el comienzo de un proceso de ajuste a las finanzas públicas, ya que el precio del petróleo permanecerá en niveles bajos por un tiempo más.
El economista en jefe de Banorte-Ixe, Alejandro Cervantes, dijo que un recorte de 100 mil millones de pesos restarán entre 0.1 y 0.2 puntos porcentuales al ritmo de crecimiento económico.
El gobierno federal estima que la economía mexicana crecerá entre 3.2 y 4.2% durante este 2015.
De acuerdo con el experto, significa que si el punto central de ese intervalo es 3.7%, el recorte al gasto podría achicar el escenario hacia un crecimiento medio de 3.5% en este 2015.
Comentó que aunque habrá un impacto negativo en el dinamismo de la actividad productiva, es importante se garantice la sanidad de las finanzas públicas, sobre todo por el compromiso de mantener una trayectoria descendente del déficit fiscal.
