Ante la facilidad que existe actualmente para que un trabajador que tiene contratado un crédito de nómina se cambie de banco sin la obligación de liquidar ese préstamo, los bancos que operan en México analizan junto con el Banco de México, la Secretaría de Hacienda y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores un esquema bajo el cual será obligatorio que el acreditado liquide su deuda antes de cambiar a otro banco el pago de nómina.
“Hay una oportunidad, porque el cliente tendría que tener pérdidas esperadas menores si el, una vez que porta su nómina, también porta su crédito, o porta su crédito si primero paga el que ya tenía en la institución donde estaba. O si cuando se cambia de trabajo tiene la obligación de forma automatizada de pagar el crédito”, explicó Eduardo Osuna, director de Grupo Financiero BBVA Bancomer.
El directivo confirmó que actualmente se discute esta posibilidad con las autoridades, con lo cual, de igual manera que un trabajador puede decidir en qué banco le paguen su sueldo, en caso de tener un crédito de nómina éste también será portable.
Alerta por alza en morosidad. Hace unos días, la agencia Fitch Ratings informó que hay preocupación entre la banca por el crecimiento que presenta la morosidad del crédito de nómina en el país, derivado principalmente por la falta de controles al momento de que un trabajador se cambia de banco o en casos extremos, si pierde el trabajo y deja de pagar su deuda.
Hasta agosto pasado, el índice de morosidad del crédito de nómina se ubicó en 2.92%, 0.23 puntos porcentuales menos en comparación con el mismo mes de 2016.
En tanto, la Tasa de Deterioro Ajustada, indicador que muestra la pérdida real por el impago en créditos, se ubicó en 12.47%, 1.46 puntos porcentuales que el mismo mes del año pasado. Hasta el momento, los bancos consideran que es manejable la falta de pago en este tipo de productos; sin embargo, se han vuelto más cuidadosos al momento de otorgar el crédito de nómina y en algunos casos han disminuido su colocación.
“Lo que hicimos, como siempre ocurre en banca, hay ciertas empresas, ciertos territorios que se empiezan a deteriorar y reaccionas de manera natural y los cierras”, dijo Osuna.
Así, en agosto pasado, el crédito de nómina creció apenas 3.1%, manteniendo su tendencia de desaceleración que se ha observado durante 2017.
“Esto es bueno para el trabajador porque sigue siendo un sujeto viable de crédito al no quedar marcado en el buró de crédito ya que un trabajador que incumple en el pago está condenado a no ser sujeto de crédito en los próximos siete años, como si fuera una maldición”, dijo Osuna.
A la par, se tendría también una reducción de costos para los bancos al disminuir la pérdida en este tipo de crédito, con lo que se podrían ofrecer tasas más bajas a un trabajador interesado en contratar este tipo de financiamiento.
“En la medida que el estado de Derecho en este país avanza y que hay un mejor comportamiento de los clientes, las tasas van bajando”, añadió Osuna.