El Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a revisar a la baja las cifras de crecimiento económico mundial para 2013 y 2014 (3.1 y 3.8%, respectivamente), previendo una expansión más lenta en ambos casos desde su última publicación en abril pasado.

La economía de Estados Unidos por los ajustes hechos a fin de ir corrigiendo el desequilibrio fiscal, también ha crecido a un ritmo más moderado, lo que ha impactado en la economía mexicana, cuyo pronóstico de crecimiento de igual forma ha sido revisado a la baja, 2.9% en 2013 y 3.2% en 2014, respondiendo a una cifra de aumento del Producto Interno Bruto menor para ese país de 1.7% y 2.7%, respectivamente, en el mismo lapso.

Ante la posible recaída que experimentará nuevamente la zona euro este año, decreciendo en 0.6% y apenas recuperándose en 2014 con un ritmo de avance de menos del 1% y las caídas sostenidas que por seis años consecutivas ha tenido Grecia y que volverá a repetir este año; así como por el magro crecimiento alemán previsto de apenas 0.3% y de 1.3% para 2013 y 2014, el FMI muestra un tono de más preocupación sobre los estragos sociales y en calidad de vida que ha ocasionado la crisis y las medidas de austeridad impuestos para superar los desequilibrios, en esta publicación.

Así, la recomendación para el grupo de 17 países de la moneda única, es que vía el Banco Central Europeo puedan implementar medidas de estímulo monetario, no convencionales, a la usanza de las instrumentadas por la Reserva Federal.

En gran medida la receta suena experimental, cuando el propio Estados Unidos aún no ha terminado con dichas medidas como para hacer una evaluación integral de sus impactos e incluso, los mercados ya han reaccionado ante la posibilidad de que el final esté cerca, generando un halo de volatilidad. Esto simplemente refleja la falta de instrumentos fiscales con qué hacer frente a la atonía económica, después de los severos problemas presupuestales y de deuda en que cayeron los países avanzados, detrás de los rescates implementados tras la crisis de 2009.

De hecho la misma China, que a pesar de todo se ha mostrado como una de las economías más dinámicas, ha anunciado que hará una revisión urgente a su deuda pública neta, la cual el año pasado totalizó 14.4 % de su PIB, por lo que relegará otros proyectos para después.

Así, el plan gubernamental tan agresivo de detonación de programas de infraestructura para apuntalar la economía, toda vez que el ritmo de exportaciones se ha desacelerado, tendrá que esperar. En este escenario, Japón, la tercera economía del mundo, pudiera ser una pieza importante y resurgir como motor del rompecabezas cuando Europa está en punto muerto y China se está enfriando.

El gobierno del Primer Ministro Shinzo Abe se ha aventurada en una arriesgada apuesta de acelerar el crecimiento económico utilizando una combinación de políticas: aceleración del gasto público, políticas de liberalización de crédito y ambiciosas reformas estructurales. La estimación de crecimiento del PIB nipón es de 2%, después de casi dos décadas de estancamiento. La resurrección de la economía japonesa para el jefe de la misión de Japón del FMI, sería una “ventaja para la economía global”.

Empero, si el plan Abe fracasa, la deuda soberana de Japón sería un onda expansiva que acabaría debilitando aún más a la economía mundial; incluso se convertiría en uno de los riesgos más importantes para la economía del orbe.

Resulta evidente que si los inversionistas llegaran a dudar de la capacidad de pago del gobierno, empezarían a exigir mayores rendimientos a costa del alto riesgo asociado y este escenario resulta muy riesgoso, cuando la deuda soberana japonesa es mucho mayor a la de otras grandes economías.

Así las cosas, la recuperación global sigue en entredicho. Las reformas estructurales de envergadura en México son imprescindibles en este ámbito de tanta incertidumbre. Por lo que, es desafortunado que el entendimiento del desarrollo nacional difiera tanto en el país o simplemente sea mirado como una pieza más del botín político; y aún cuando éstas se dieran los efectos no son inmediatos.

* Coordinadora de la Maestría en Economía y Negocios y Directora del Instituto de Desarrollo Empresarial Anáhuac (IDEA) de la Universidad Anáhuac

Google News

TEMAS RELACIONADOS