Entre un 10 y 15% impactó las ventas del sector restaurantero el anuncio por parte de la Secretaría de Salud federal de que Querétaro volvía al semáforo rojo de la pandemia por Covid-19, aseguró Octavio Mata Rivera, presidente de Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
“Íbamos bien, en un 45% en promedio de ventas, pero con esta noticia del fin de semana se cayó un poco, esperemos volver a recuperar después del mensaje del gobernador, donde nos da la confianza de seguir trabajando y hacer bien las cosas, y esperemos que en pocos días se vuelva a recuperar, porque se cayó entre un 10 y 15% de las ventas que ya se tenían”, puntualizó.
Adelantó que esta semana, el sector gastronómico lanzará una campaña para otorgar cubrebocas a los comensales, ya que una de las medidas es que porten este artículo al desplazarse al interior de los restaurantes.
“Se va a crear una campaña fuerte y agresiva con el tema de uso de cubrebocas para ayudar a que la gente se concientice y sigan usando los cubrebocas (...) Nos hemos dado cuenta que la gente llega sin cubrebocas al establecimiento, en ocasiones nos cuestionan que si van a comer para qué se ponen el cubrebocas, pero es para que se puedan mover al interior de las instalaciones, es parte de la seguridad que debe haber en cada restaurante”.
Calificó como “atinada” la decisión del gobierno estatal de no dar la orden para el cierre de aquellos establecimientos que apenas hace un mes reanudaron actividades, luego de tres meses de inactividad.
“Siempre ha sido muy consciente en tener la comunicación con los empresarios y con la iniciativa privada habla bien de él (gobernador), y tiene el pulso de cómo está la situación en Querétaro y nos ayuda a nosotros para reactivar los negocios (...) El que abramos los restaurantes, es también ayudar a otros sectores, no solo al gastronómico, ya que somos un eslabón muy importante de la cadena productiva”, destacó.
Mata Rivera confirmó que el sector está haciendo bien las cosas, pero de ser necesario van a reforzar las acciones que la autoridad les pida para no tener ningún problema y seguir funcionando como hasta el momento.
Ningún restaurante afiliado a Canirac ha sido suspendido por no acatar todas las medidas de higiene indispensables, lo cual se puede comprobar en cada una de las visitas que les hacen diario -hasta tres veces por día- las diferentes dependencias: Inspección municipal, Protección Civil o Secretaría de Salud.
“Hemos tenido pequeñas observaciones, pero problemas serios para una suspensión o clausura no, afortunadamente todos están tomando las medidas necesarias, están siendo responsables y serios sabiendo que la situación es difícil y que si no cumplimos corremos el riesgo de ser clausurados y de afectar a otras personas, porque si hiciéramos mal las cosas el gobernador hubiera tomado otra decisión”, destacó.
