Alrededor de 25 mil trabajadores de bares y antros llevan cinco meses sin trabajar debido a que los establecimientos del ramo no se les ha permitido operar.
Rogelio Garfias Torres, vicepresidente de la Asociación de Restaurantes, Bares y Discotecas, espera que el gobierno del estado “se apiade de nosotros y nos deje volver a laborar”.
Garfias Torres señala que la comunicación con autoridades ha sido complicada y que han sido inflexibles, por lo que aún no se tiene una fecha establecida para reactivar este tipo de negocios.
“Los empresarios estamos al borde de la desesperación y aún no hay respuesta de parte del gobierno del estado.
“De esto [la apertura de bares o antros] dependen los empleos de garroteros, meseros, cocineros, valet parking, taxistas y demás.
“Nosotros calculamos que son 25 mil las personas que dependen directa e indirectamente de estos establecimientos en todo el estado. Son empleos detenidos, no hemos podido trabajar.
“Nosotros llevamos cuatro meses cerrados, ya casi cumplimos cinco meses y no hemos recibido ningún tipo de ayuda [por parte de las autoridades].
“A las autoridades les pedimos que tengan piedad, no hay comunicación con las autoridades estatales, los hemos buscado y nunca tenemos respuesta.
“Aún no podemos calcular las pérdidas de los empresarios de este sector, pero serán pérdidas muy grandes.
“Aunque reactivemos actividades ya mismo, no nos alcanzaría el año para recuperarnos. Dependemos de la voluntad de las autoridades”, expresa.
Rogelio Garfias también detalla que en la asociación se registran 475 bares y discotecas, de las cuales al menos 27 establecimientos ya han cerrado definitivamente debido a la inactividad y la falta de ingresos económicos.
Señala que están comprometidos a cumplir con todas las medidas de salubridad antes señaladas por las autoridades estatales, lo que, afirma, ayudaría a disminuir el número de fiestas clandestinas también llamadas after.
“Las fiestas clandestinas están en todo su apogeo y creo que eso es peor, todos preferimos que las personas vayan a lugares regulados, con normas, con cubrebocas, lugares sanitizados.
“En los llamados after no respetan nada de eso, ni siquiera la policía puede entrar porque son domicilios particulares y, sin embargo, ahí es donde se están reuniendo los jóvenes ahorita, porque nosotros no hemos podido abrir”, destaca.
Los dueños de los antros y discotecas en Querétaro llevan meses meses sin operar debido a la contingencia sanitaria por el Covid-19, debido a que cuentan con licencia de discoteca o bar, en lugar de la de restaurante.
Cabe señalar que en el transcurso de la semana, empresarios del ramo se reunieron con representantes del gobierno capitalino para buscar una pronta solución a este problema.
Por su parte, el secretario de gobierno municipal, Apolinar Casillas Gutiérrez, asegura que están evaluando las opciones y que en las mesas de trabajo, además de los interesados, también participan autoridades estatales y municipales, como la Secretaría de Salud, Protección Civil y Desarrollo Económico.