Por falta de inversión en obra pública, las empresas constructoras operan a 50% de su capacidad instalada, lo que está llevando a un recorte de personal en la mayoría, dio a conocer el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, Álvaro Ugalde Ríos.
De acuerdo con datos del Centro de Estudios Económicos del Sector de la Construcción (CEESCO), en los primeros cinco meses del año el empleo en la industria de la construcción en Querétaro cayó 15.4%, porcentaje superior en 11.5% a la caída que se tuvo en el país, que en dicho periodo bajó 3.9%.
En los primeros cinco meses de 2019, las empresas constructoras emplearon en Querétaro a casi 15 mil personas, señala el CEESCO.
Ante esta situación en la cual se observa una caída de 16%.2 en el valor de la contratación de la obra pública a nivel estatal, que registra una caída de 60% en el primer semestre de 2019 frente al mismo periodo de 2018. Ugalde Ríos, dice que el gobierno federal necesita incentivar la inyección de recursos a la infraestructura en Querétaro.
Señaló que derivado de la baja de recursos que dispersó la federación al sector este año, ya comienzan a presentarse los primeros despidos de personal en pequeñas y medianas constructoras.
Álvaro Ugalde señaló que actualmente el sector de la construcción opera a 50% su capacidad instalada, por lo que las empresas “se han visto obligadas a reducir su plantilla laboral y destinar su tiempo a dar mantenimiento a sus oficinas o a su maquinaria en tanto se reactiva la oferta laboral de obra”.
En este escenario, pidió apoyo a las autoridades federales para revertir esta situación de recesión.
Ugalde Ríos refirió que si bien mantienen contacto permanente con las autoridades estatales a través del titular del Ejecutivo estatal, a la CMIC le preocupa de manera puntual la aportación de mil 900 millones de pesos que mandaba el gobierno federal a Querétaro.
“Hemos hablado con el gobernador Francisco Domínguez porque es nuestro representante más cercano, y nos ha dicho que en la parte que le toca al estado habrá inversión sin precedente a comparación de los otros años que ha estado al frente, lo cual nos da cierta tranquilidad”, señaló.
Álvaro Ugalde manifestó que esta disminución en la inyección de recursos que deja de aplicar la federación a Querétaro impacta de manera directa en las propias arcas del gobierno federal, pues hay un estancamiento en el consumo y por ende una baja en la recaudación tributaria. “De acuerdo a sus indicadores, una baja captación de ingresos porque hay menos trabajo”, señaló.