Ante la entrada en vigor, en enero de 2023, de los denominados impuestos verdes o impuestos ambientales, —uno de los cuales impactará al sector de la construcción— la industria de la vivienda se verá afectada en sus precios, incremento que tendrá que ser absorbido por el cliente final, consideró el presidente del Consejo Estatal de Profesionales Inmobiliarios de Querétaro (CEPIQ), Arturo Hernández Serrano.
El líder gremial señaló que ante las obras de infraestructura y los proyectos que se plantean por parte del gobierno estatal, como lo es la reestructura de Paseo 5 de Febrero, se trata de montos económicos altos que deberán garantizarse ante un panorama en donde los recortes federales continúan.
“Sí va a tener su impacto de manera proporcional. Hay dos maneras de conseguir el dinero que se requiere: uno es la deuda, que esperemos que no se incurra en deuda, que no se endeude el estado y los municipios; la otra es atraer más y mejores inversiones, que es un proyecto que traen todos los municipios y, la otra, tener nuevos impuestos, derechos o contribuciones”, señaló.
Si bien aún no han estimado el impacto real que tendrían estos impuestos en el sector, comentó que esta situación “no los tiene muy contentos”, pero saben que para que el estado no incurra en deuda, se tiene que recurrir a este tipo de estrategias, lo que “no nos encanta; sin embargo, sabemos que es necesario”.
“Por supuesto [que se va a trasladar al cliente final], no lo va a absorber el constructor, eso es un hecho, si de por sí el margen de utilidad ahorita se ha ido disminuyendo, haciendo mucho más apretado, no se puede absorber”, aseveró.
Al respecto, el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en el estado, Óscar Hale Palacios, señaló que, de acuerdo con lo que ha planteado el gobierno estatal, las empresas podrán disminuir el monto a pagar por concepto de este impuesto al implementar estrategias compensatorias, como el uso de tecnologías que reduzcan la afectación al medio ambiente; sin embargo, aún no se ha dado a conocer la forma en como este impuesto será cobrado ni la forma en como se podrá compensar, por lo que, en un primer momento, sí se prevé un alza en precios por este motivo.
“El de nosotros es el impuesto a extracción de materiales no minerales, son dos materiales que se están manejando ahí, los de alto y bajo impacto, los de alto impacto son gravas, balastro, materiales más gruesos como piedras y los materiales más delgados y de bajo impacto, como tepetate, arena. Aproximadamente [el impuesto] será del 30% del valor del material”, detalló.
Serán tres impuestos los que entrarán en vigor a partir del próximo año, el primero buscará regular las emisiones de gases a la atmósfera, el segundo sobre la generación de residuos de manejo especial y el tercero sobre la extracción de minerales no metálicos, este último es el que impacta directamente a la industria de la construcción.