Aunque la llamada ‘cuesta de enero’ parezca interminable, lo mejor es no caer en tentaciones y evitar usar las tarjetas de crédito que tenemos a la mano, pues según Ángel Alfonso Márquez, presidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro, de esa forma sólo conseguiremos gastar dinero que en realidad no tenemos.
“Cuando usamos tarjetas de crédito es como si el banco nos presta dinero, pero no lo tenemos físicamente, estamos gastando dinero del futuro, después ya no podemos hacer frente a los créditos bancarios, nos salimos del presupuesto, gastamos dinero que no tenemos, eso le pasa tanto a empresas como personas físicas, echamos mano de estos préstamos, nos salimos de nuestro presupuesto y nos genera problemas para todo el año.
“En diciembre y enero es donde más surgen este tipo de situaciones, primero por las fiestas, después por la cuesta de enero y viene la colegiatura, libros, uniformes, las alzas en los productos por la inflación, nuestro salario es el mismo y generalmente esas cosas no las tomamos en cuenta”, explicó.
El presidente del Colegio de Contadores Públicos de Querétaro, asegura que las nuevas generaciones son las que más problemas presentan al momento de administrar correctamente las tarjetas de crédito; para evitarlo, dijo, lo mejor es usarlas en situaciones especiales y no tomarlas para hacer compras de todos los días.
“Las recomendación es usar las tarjetas de crédito para compras muy específicas. Lo mejor es hacer un ajuste en nuestros gastos, sea cual sea la forma de pago, controlar lo que gastamos, minimizarlos al máximo y respetar nuestros presupuestos iniciales, esa es la mejor forma de no desfalcarnos”, dijo.
Según las encuestas de las plataforma de servicios financieros coru.com y la empresa de estudios de mercado Brad Engagment sobre los gastos que más preocupan a los mexicanos al inicio de año; a 41.9% le preocupa el pago de servicios básicos como agua, predial e impuestos, 14.29% dice algún tipo de préstamo o crédito, a 13.4% le preocupa la renovación del seguro del auto, a 9.7% le preocupa la anualidad o saldos pendientes de tarjetas de crédito, a 7.8% el alza de precios o colegiaturas, y a 3.7% le preocupa otro tipo de gastos.