Autoridades de Salud pedirán a los gobiernos municipales extender una hora más la operación de restaurantes para cerrar a las 11 de la noche, esta medida también aplicaría para bares, casinos y centros nocturnos, informó el gobernador Francisco Dominguez Servién.
Debido a que el semáforo epidemiológico de riesgo Covid-19 llegó al color amarillo, se propuso ayer jueves la pertinencia de que los bares, centros nocturnos y casinos puedan cerrar a las 12 -por la naturaleza de su servicio- y con ello dar la misma oportunidad a los restaurantes. Será en los próximas días, cuando se espera, se apruebe la propuesta.
“La Federación nos puso en semáforo amarillo, y el Comité Técnico de Salud tiene la facultad de hacer restricciones, en este momento [jueves] están sentados a la mesa para proponerle a los municipios, por ejemplo, los horarios; me dicen que una propuesta es que sea como están los restaurantes a las 11 de la noche o a las 12 de la noche, todos parejos”, dijo.
El 17 de junio pasado, cuando el gobierno estatal determinó transitar al semáforo naranja de riesgo Covid, se permitió la apertura de restaurantes a un 50% de su capacidad y con un horario de cierre a las 10 de la noche; previo a ello se limitaban al servicio para llevar.
Para el 1 de septiembre, cuando se permitió la apertura de sitios de entretenimiento y cultura, se extendió el horario a las 11 de la noche para los restaurantes; ahora, con el semáforo amarillo (desde el 28 de septiembre), los restaurantes ya tienen permitido un aforo de 70%, además que ya pueden operar bares, antros y casinos.
El mandatario reiteró que estas medidas están pensadas para reactivar la economía y no para tener una visa social libre, sin ninguna medida sanitaria, por lo que reiteró necesaria la responsabilidad ciudadana para acatar lineamientos.
“Vamos a ver cuál es la decisión del Comité, ellos lo votan y lo darán a conocer para que actúen los municipios; nuestra única vacuna es el cubreboca, si lo usamos constantemente vamos a evitar que nos regresemos a semáforo naranja o peor a semáforo rojo y otra vez se complique la economía”, añadió.
En ese tenor, reconoció la decisión de la directiva de Gallos Blancos de seguir con partidos a puerta cerrada, pese a que tenían posibilidad de tener un aforo de 30% en el estadio Corregidora.
“Esta es una oportunidad para la economía, para mejorar los empleos, no es de convivencia social. Aplaudo por eso la medida de Gallos, que tenían derecho de abrir sus puertas el domingo y no van a abrir sus puertas hasta después de la mitad del mes de octubre”.
